II Domingo Cuaresma: "Billy Elliot", aprendiendo a bailar
“Billy Elliot. (Quiero bailar)” (2000) Stephen Daldry
Esta premiada película cuenta la historia de Billy, un chico de 11 años que crece en una familia de mineros que se encuentran inmersos en la huelga del carbón en el Reino Unido. Su madre murió mientras su padre y su hermano trabajan en la mina y padecen las consecuencias del conflicto, al lado está la abuela que de joven quiso ser bailarina. Lo mismo que le ocurre a Elliot que quiere bailar, pero su padre se opone. Esta negativa recuerda al episodio de Abraham que quiere a su hijo pero está dispuesto a sacrificarlo(1ª Lect.). Sin embargo, Elliot ayudado por su profesora de ballet logra transfigurarse y cumplir su sueño algo que nos recuerda el evangelio de hoy.
• Ante Billy hay dos caminos: el boxeo o el ballet. El boxeo es lo que quiere su padre para poder enfrentarse a la dureza de la vida de los mineros. El ballet es lo que le sale de dentro. ¿Pueden los padres imponer su proyecto a sus hijos? ¿Se puede comprender así algo del mensaje del frustrado sacrificio de Isaac?
• Cuando Billy baila se transfigura. Especialmente en la escena que baila ante los jueces de la beca y su padre. ¿En qué medida Billy saca lo mejor que lleva dentro? ¿Cómo sacamos lo mejor que llevas dentro?
• En el episodio del monte Tabor la transfiguración muestra la identidad de Jesús en su relación con Dios Padre, es el Hijo amado ¿Tiene esto que ver con lo que pasa en el monte Moria (1º Lect.) y con lo que ocurrió en el monte Calvario (2º Lect.)?
• La transfiguración es una anticipación de la resurrección. ¿Vivimos las dificultades en perspectiva pascual? ¿Sabemos “bailar” en medio de las pruebas?
(Orientación para padres y educadores: No recomendada a menores de 7 años con escenas sobre sexualidad, palabras fuertes del ambiente minero y alguna pequeña tensión y violencia)