La llamada cristiana a cuidar de la creación nos invita en este día a renovar nuestra colaboración con el Creador para custodiar la belleza de las criaturas de Dios. El medio ambiente está en peligro y pone en peligro a la humanidad. El cuidado de la Tierra forma parte del cuidado de los hermanos y especialmente de los más pobres que son las primeras víctimas de la injusticia climática.
A pesar de las informaciones que trata de confundir y manipular desde intereses económicos, sabemos que el cambio climático nos está afectando a todos y que el cambio de rumbo es obligado para salvaguardarnos a todos y especialmente a los más vulnerables. Hay un consenso científico sobre las consecuencias que la actuación humana está teniendo sobre el clima. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) nos presenta en este vídeo la importancia de abordar urgentemente un calentamiento global menor de 1,5 grados, ya que pasar de esta temperatura puede tener consecuencias catastróficas. Como indica el papa Francisco: “En cuanto al cambio climático, hay un imperativo ético claro, definitivo e ineludible para actuar”

Esta es la propuesta del Movimiento Católico Mundial por el Clima que reúne a diferentes organizaciones católicas preocupadas por el cambio climático causado por el hombre. Así unidas por la fe católica en la custodia de la creación, la salvaguarda de los pobres y la herencia a las jóvenes generaciones pretenden renovar la relación con la creación desde responsabilidad de cada uno y promoviendo la justicia climática desde el compromiso político por resolver la crisis climática.

Urgente en este momento es la educación en la responsabilidad por la creación comprendiendo el sentido cristiano del Dios Creador del cielo y de la tierra que implica también la libertad de las decisiones humanas por el cuidado y la colaboración o por la destrucción y la dominación aniquiladora de las criaturas. Reconociendo en qué medida la estructura del pecado puede poner en peligro el proyecto de bondad creadora. En este sentido la enseñanza escolar, las catequesis y los grupos cristianos deberán promover acciones en este sentido.

La oración también se convierte en una forma de colaborar con el designio de Dios. La intención de oración universal del Papa Francisco para abril 2015 es “Para que la gente aprenda a respetar la creación y cuidar de ella como un regalo de Dios”. Compartamos esta oración.