Jorge Concha Cayuqueo, O.F.M, quien se desempeñaba hasta ahora como pastor de la Iglesia de Osorno, fue nombrado este sábado, 4 de marzo, por el Papa Francisco nuevo obispo de la diócesis de Temuco.

"Es un nombramiento sorpresivo que me causa tristeza por un lado", dijo en exclsuiva el obispo a Religión Digital,  "por tener que dejar Osorno, de cuya iglesia tengo gratitud por todo lo que significa, pero también lo recibo con mucha alergría, porque es mi tierra que amo, donde nací y tengo mi familia, que no es muy numerosa".

Añadió que siente este nombramiento que le ha hecho el Papa como "todo una gran responsabilidad. Dios quiera que podamos juntos ser un buen aporte para la fraternidad, la paz y la justicia, en medio de las situaciones tan complejas que tiene Temuco. Tengo gratitud y mucha confianza en Dios", señaló. 

Por su misma espiritualidad franciscana, Jorge Concha Cayuqueo es una persona sencilla, y conforme a lo que se le vió en Osorno, seguramente en Temuco también se le vea caminando por las calles y muy cercano a la gente.

Concha estudió en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde obtuvo el Bachillerato en Ciencias Religiosas, y se caracteriza por tener un pensamiento amplio, que escucha, es dialogante y con una eclesialogía basada en el caminar de la iglesia latinoamericana.

Desempeñó cargos en su orden, en parroquias de Santiago y en la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile (CONFERRE). En 2015 el Papa Francisco lo nombró obispo auxiliar de Santiago de Chile, y en 2018 fue nombrado administrador apostólico de Osorno, que vivía dolorosas situaciones por la presencia de Juan Barros, el obispo encubridor. Luego, en 2020, Concha Cayuqueo fue nombrado obispo titular de esta misma diócesis generando aquí una tranquilidad eclesial que ha permitido el desarrollo de la comunidad.

El nuevo obispo de Temuco es doctor en Ciencias Sociales por la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma, Italia. Su preparación académica es un antecedente importante que le proporciona conocimientos y análisis para enfrentar una de las zonas de más alto conflicto político de la realidad chilena, la Araucanía, donde el Estado sigue interviniendo con el uso de la fuerza en lugares habitados por comunidades mapuche.

Zona de Conflicto

Temuco es una diócesis sufragánea de la provincia eclesiástica de Concepción, y su territorio es parte de la "macro zona mapuche" como le denominan a nivel político, y es habitada por un pueblo originario que ha sido despojado de sus tierras. Y hoy, tras cinco siglos de histora, sigue luchando por sus derechos.

Frecuentemente sus comunidades son objeto de allanamientos, hay permanente vulneración de derechos, hechos creados para la difusión, personas detenidas y sus líderes encausados e imputados judicialmente por diferentes delitos. Algunos de ellos protestan con huelgas de hambre en las cárceles. Además, sufre la indolencia de la clase política que no dimensiona la profudidad del problema.

Si bien la gran mayoría de la población mapuche es muy pacífica pero desea contar con oportunidades para prosperar y con los elementos básicos que aseguren su bien vivir, hay una parte más radicalizada, joven y bien preparada profesionalmente, que participa en movimientos políticos y de resistencia que énfatiza cambios estructurales.

En este contexto, la autodeterminación de la nación mapuche garantizada por el  Convenio 169 de la OIT que considera el autogobierno de un grupo, bajo la existencia de un Estado, quedó medianamente claro en el proyecto constitucional que fue rechazado en septiembre del año pasado por plebiscito.

Ahora, en el nuevo proceso constituyente, la participación y situación del pueblo mapuche es nada claro lo que levanta nuevos desafíos al nuevo pastor diocesano.

Apenas una horas de conocido su nombramiento, las primeras reacciones en Chile indican que Temuco ganó un buen obispo.

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