Culmina un trabajo que ha llevado, literalmente, años La biblioteca de San Esteban se renueva y actualiza
El histórico y prestigioso fondo bibliográfico de la biblioteca del convento de San Esteban se ha visto incrementado y enriquecido, de manera exponencial, con la llegada de nuevas bibliotecas
Provenientes de distintos ámbitos educativos de los dominicos de la Provincia de Hispania, uno de ellos, y el más destacado, es el gran fondo filosófico que vino del Instituto de Filosofía de San Gregorio de Valladolid
Rodrigo OP: "Con la finalización de este proyecto estamos dando un paso más, firme, en el llamado 'continente digital' que ponemos a disposición de los estudiosos de las ciencias humanas y de la teología"
Rodrigo OP: "Con la finalización de este proyecto estamos dando un paso más, firme, en el llamado 'continente digital' que ponemos a disposición de los estudiosos de las ciencias humanas y de la teología"
| Dominicos
(Biblioteca San Esteban).- El fondo bibliográfico del Convento y de la Pontificia Facultad de San Esteban, especializado en filosofía y teología, situado en la ciudad universitaria de Salamanca, se amplía, convirtiéndose en uno de los más grandes, no sólo de la ciudad sino de todo el mundo hispanoparlante.
El histórico y prestigioso fondo bibliográfico de la biblioteca del convento de San Esteban se ha visto incrementado y enriquecido, de manera exponencial, con la llegada de nuevas bibliotecas, provenientes de distintos ámbitos educativos de los dominicos de la Provincia de Hispania, uno de ellos, y el más destacado, es el gran fondo filosófico (de libros y revistas) que vino del Instituto de Filosofía de San Gregorio de Valladolid, aportando más de setenta mil volúmenes (sólo en libros) junto con otros tantos miles de revistas científicas que también se han incorporado.
La llegada de tal cantidad de volúmenes, realizado en distintas fases, hizo que toda la estructura de los depósitos tuviesen, necesariamente, que actualizarse y adaptarse, junto con reordenar los espacios, para que todo pudiese quedar situado y, posteriormente, localizado con facilidad.
Este trabajo ha llevado, literalmente, años. A todo este proceso “físico”, por llamarlo de alguna forma, le faltaba el proceso “lógico/digital” para que la comunidad educativa pudiese consultarlo online. Y esto último ha sido el proyecto que durante meses se ha realizado: la unificación de las bases de datos de ambos fondos, tanto en libros como en revistas; la gestión documental ha sido enorme (se han actualizado, sin contar los artículos de revistas que son otros tantos, en torno a ciento setenta mil fichas de libros), para que cualquier investigador o estudiante, desde cualquier parte del mundo, pueda consultar dicho fondo.
El proyecto se ha completado, también, con la actualización de los respectivos programas de gestión de otras dos bibliotecas dominicanas: Libro Histórico y Dominicanismo de Caleruega; a partir de ahora estas tres bibliotecas estarán alojadas en un nuevo servidor, de última generación, que hará, entre otras cosas, que el acceso sea mucho más rápido y eficiente (también, en los próximos meses el fondo de la biblioteca se seguirá incrementando con alrededor de treinta mil volúmenes más que están ahora en fase de clasificación).
Cuando se ha finalizado un proyecto de tal envergadura, sólo queda agradecer a los que durante todo este tiempo han trabajado, aportando su valor al mismo: a la empresa de gestión documental Xercode, a los técnicos de la biblioteca de San Esteban y a la Oficina de Internet de los dominicos de España.
Como dice el responsable del proyecto, y del desarrollo digital del convento y de la Facultad, Rodrigo OP: “Con la finalización de este proyecto, que ahora presentamos, estamos dando un paso más, firme, en el llamado “continente digital” que ponemos a disposición de los estudiosos de las ciencias humanas y de la teología. También, con el inicio del nuevo curso académico presentaremos otros nuevos proyectos que ya están en marcha. Estamos seguro que con todos estos nuevos desarrollos, San Esteban, y su histórica presencia cultural en la ciudad, y más allá de la misma, seguirá estando en la primera línea de la investigación y del diálogo entre la teología y la sociedad, entre la fe y la cultura”.