La gran influencia de los padres en los hijos

El Evangelio es un mensaje para la vida:

Comntario Evangelio 20 de diciembre 2015

Lucas 1,39-45:

En aquellos días, María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá; entró en casa de Zacarías, y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isa­bel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: «¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. ¡Dichosa tú, que has creído! Porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá».



a)"Saltó la criatura de alegría en mi vientre": ¡Qué grandeza, qué felicidad y qué responsabilidad ser padres! Es hacer posible la persistencia en este planeta de la obra cumbre de la creación, el ser humano, en virtud de la fuerza evolutiva filogenética impresa por Dios en el origen del Universo.



Es por lo que el desarrollo integral del ser humano, hombre-mujer, empieza mucho antes de su desarrollo embrionario, y no solo desde el punto de vista físico, sino también en todos los demás ordenes que conforman la estructura completa de cada hombre y mujer.



Todo lo que son los padres ya lo trasmiten al hijo antes de su nacimiento, lo cual va a depender también de todo lo que ellos han recibido, porque todo está religado con todo, todo depende de todo, todo influye en todo, todo afecta a todo. El hijo que unos padres o una mujer quieren tener debe ser deseado y querido ya antes de su concepción. Prepararse lo mejor posible y en todos los órdenes para la paternidad-maternidad es un deber ineludible, porque el futuro del hijo va a depender en gran parte de esta preparación.



El cuidado de la salud de los padres, su unidad, su amor, su armonía, su identificación, su empatía, todo eso y más va tener mucha influencia en su hijo. Un niño puede desarrollarse feliz, alegre y sano desde el seno materno, o todo lo contrario.



Hoy ya todos tenemos conocimiento de que heredamos de nuestros padres muchas predisposiciones genéticas, tanto positivas como negativas, no solo en el orden fisiológico, sino también en el intelectual y emocional:



b) Herencias que recibimos de los padres:



-A la semana 20 de embarazo, el cerebro del niñ@ ya cuenta con 30.000 millones de neuronas y está desarrollando las áreas destinadas a los sentidos del gusto, el olfato, la audición, la visión y el tacto. Es el momento de empezar a comunicarse con él, ambos padres, sobre todo la madre.



-A la semana 26 del embarazo reacciona al sonido, las caricias y la luz, y especialmente a la voz de la madre. Todo esto debe ella tenerlo muy en cuenta, para tratarlo de la manera más gratificante posible.



-A la semana 40 del embarazo el bebé ya está preparado para nacer, pero algunos órganos continuarán desarrollándose durante los primeros años de vida, sobre todo el cerebro, creando millones de conexiones neuronales.



Muy importante: Las drogas (alcohol, tabaco, sicoestimulantes) impiden la completa arborización dendrítica del cerebro, que no concluye hasta los veinte años. El alcohol, antes de esa edad, poda el cerebro para siempre, afirma el siquiatra Julio Bobes.



Las deficiencias nutritivas de la madre durante la gestación, y del niño hasta los seis años deterioran hasta un 20 % el desarrollo intelectual. Lo saben bien los profesionales que trabajan con personas desnutridas de los países pobres. ¡Cuántas madres y cuántos niños y niñas hemos visto desnutridos en Guatemala: ¡qué tristeza ver, sobre todo a los niños y niñas ir para la “cama” con muy poca o nula cena y mucha cara de hambre! Cuando les daban un poco de frijol negro en el fondo de una taza de plástico blanca, lo aprovechaban tanto que aparentemente no hacía falta fregar la taza. La pobreza alimenta la falta de inteligencia, y esta repercute en mayor pobreza generando un círculo vicioso.



Este Evangelio nos deja bien claro que la educación emocional empieza en el útero materno. Los sentimientos de la madre se transmiten al niño ya antes de nacer. Las ansiedades y los conflictos emocionales de la madre multiplican por dos la hiperactividad del niño, y le pueden producir trastornos de conducta, incluso con posible riesgo de comportamientos delictivos, según nos enseñan los estudiosos de esta etapa de la vida. Por eso el buen clima familiar, la estabilidad emocional, la plena armonía matrimonial y la seguridad física de contar con los medios suficientes para ello, deben acompañar siempre la procreación desde del momento mismo de la concepción activa para que la nueva vida alcance el mayor desarrollo integral posible.



c)El Evangelio es un mensaje para la vida:



Todo cuanto dicen los Evangelios encierra un mensaje para la vida. Aunque leas el Evangelio una y otra vez, siempre que sea buscando una respuesta para la realidad de la vida con sus problemas, ansiedades, aspiraciones, inquietudes, preocupaciones, interrogantes, siempre te dirá alguno bueno, que te dará luz para seguir caminando y ser más feliz. Si vas a ser madre que tus hijos salten ya de alegría en tu vientre: serás dichosa tu y los harás dichosos a ellos ya antes de nacer. Este mensaje nos trasmite el fragmento evangélico de hoy.



Un abrazo muy cordial a tod@s, y en especial a los niñ@s.-Faustino
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