ELÍAS POSTMODERNO
01. PAN DE VIDA
Continuamos hoy escuchando el capítulo 6º de san Juan que desarrolla la cristología del PAN de VIDA. YO SOY EL PAN DE VIDA.
02. ELÍAS: UN HOMBRE POSTMODERNO
Hoy hemos asistido en la primera lectura a un momento en el que Elías huye de la reina Jezabel que ha jurado matarlo. Elías desaparece de escena y se va al desierto. Elías se cansa ya de vivir y se desea la muerte: no valgo más que mis mayores.
Dios le dice: Levántate, come que el camino es superior a tus fuerzas.
Cansancios y canseras hay muchos en la vida y de muchos tipos: postraciones, abatimientos y desánimos hay mil en la vida. Hay que tener coraje: audacia para levantarse, comer y seguir el camino que es superior a nuestras fuerzas.
En el fondo la llamada depresión es un cansancio existencial que en castellano podemos denominamos cansera: ya no quiero, no vale la pena vivir más. Personalmente, como sociedad-política, como iglesia podemos llegar a momentos en los que sentimos harto cansados, siempre igual y no cambia nada...
03. ALIMENTARSE DEL PAN DE VIDA: LEVÁNTATE Y COME.
Levantarse y comer no son cuestiones meramente físicas, sino más bien personales: levantarnos de nuestros cansancios, cuando no caídas en la vida, comer del pan que alimenta el cuerpo, pero sobre todo, el alma y ponernos de nuevo en camino.
La salud, la creatividad, el tono vital no son cuestiones meramente físicas, ni tan siquiera médicas. La alimentación, la medicina, la higiene, la psicología son cuestiones importantes, pero no son la “varita mágica”.
Hay que alimentarse de pan de vida. Esto significa alimentarse de valores, de cultura, de criterios sanos.
Hay panes que sedan o distraen el hambre de la existencia, pero no alimentan.
04. CRISTO ES EL PAN DE VIDA.
Cristo pudo haber dicho que la vida y la felicidad radicaba en otras cuestiones:
o cuantas más pagas extraordinarias tengáis tendréis más vida, sin embargo proclamó la pobreza cuando fuente de felicidad.
o cuanto más poder económico, político o eclesiástico tengáis, viviréis más, sin embargo proclamó el servicio y rechazó el poder.
o Cuantos más tanques y misiles tengáis, mejor; sin embargo, JesuCristo proclamó la paz como fuente de felicidad y de vida.
o Cuantos más ritos religiosos hagáis y mejor cumpláis las leyes de la Iglesia, tendréis más salvación.
El pasado domingo, 5 de agosto decía el papa Francisco en el ángelus: Es una tentación común reducir la religión sólo a la práctica de las leyes.
En esas cuestiones aludidas no está la vida.
Cristo se presenta como PAN DE VIDA.
05 ESTE ES EL HIJO DEL CARPINTERO. ELEVARSE POR ENCIMA DE LOS SÍMBOLOS.
Jesús es la clave y el escándalo. Se presenta como pan de vida que baja del cielo, se presenta como hijo de Dios, que habla de lo que Dios le ha dicho. Pero para los ojos de la mayor parte de sus contemporáneos, como para nuestros contemporáneos, Jesús es el hijo de la señora María, del carpintero que “ya sabemos quiénes son”...
Esta es una de las diferencias ente el cristianismo y otro tipo de concepciones religiosas. El cristianismo es profundamente materialista: efectivamente Dios está en Jesús, en la humanidad de Jesús: el Verbo se hizo carne.
Las personas religiosas no pueden comprender que un hombre sea expresión de Dios porque les va mejor un “Dios lejano, etéreo, que no toque la vida concreta”.
El ser humano es quien va siempre un paso más allá de la realidad. La realidad es un símbolo que hemos de transcender.
Del texto de hoy podemos sacar una conclusión: la razón no es la medida de la realidad. Si miramos las cosas, las personas, los problemas únicamente -únicamente- desde la razón, no llegaremos al ser de la vida. Decía Pascal que la fe tiene razones que la razón no conoce. Hay que ser razonables en la vida, pero hay muchas dimensiones que están un paso más allá de la razón:
o Por vía racional no llegaremos de la creación a Dios. Habrá que activar otros mecanismos como son la poética y la fe.
o El perdón no es fruto de la razón. El perdón será fruto del amor.
o Escuchando la pasión de San Mateo de Bach o una melodía podemos “tocar” la belleza, la redención, el amor, llegar a Dios pero no por vía racional, sino por la emoción estética, muy diversa de la racional.
o Jesús fue un hombre. Nunca llegaremos por vía racional a afirmar que el hijo del carpintero es hijo, expresión de Dios.
o El celibato es irracional, lo cual no significa que no sea valioso que algunas personas, renuncien elegante y espiritualmente a una dimensión de su vida por el ideal del reino de los cielos.
o La esperanza no es lo más mínimo demostrable por vía racional; sin embargo nos es absolutamente necesaria para vivir.
La crisis de la modernidad radica en pensar que únicamente es verdad lo demostrable y verificable. Lo que no puedo demostrar no existe, ni es.
Recuperemos el mundo del símbolo, de la transcendencia, del relato, de la poesía, de la delicadeza, de la teología narrativa.
La realidad, el ser, es más amplio que lo que yo sé o puedo conocer.