Asamblea del Consejo Indigenista Misionero en el Regional Norte1 de Brasil Cardenal Steiner: "Para el Congreso brasileño, los indígenas no tienen valor ni dignidad"
Una Iglesia que, bajo los auspicios del Papa Francisco, está cada vez más atenta a las cuestiones relacionadas con la pobreza, el medio ambiente y los pueblos indígenas
Inculturar la liturgia y la espiritualidad introduciendo elementos indígenas, para que las comunidades tengan el alma de los pueblos indígenas
El reto para la Iglesia es pasar a un compromiso efectivo, que ahora es marginal y periférico, pues no es un tema central en nuestros procesos evangelizadores
El reto para la Iglesia es pasar a un compromiso efectivo, que ahora es marginal y periférico, pues no es un tema central en nuestros procesos evangelizadores
Luis Miguel Modino, corresponsal de RD en América Latina y Caribe
El Consejo Indigenista Misionero del Regional Norte1 celebra su 44ª Asamblea del 2 al 4 de febrero de 2024, en Manaos, con el tema "La lucha por los territorios libres: avances y retrocesos en la defensa de los territorios de los pueblos indígenas", y el lema "La Tierra gime con dolores de parto" (Rom. 8:22). Están presentes líderes indígenas, misioneros del CIMI y varios obispos del Regional Norte1 de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil.
Una Iglesia atenta a los pobres, el medio ambiente y los pueblos indígenas
Es una asamblea para evaluar el camino, pero también para vislumbrar los pasos a seguir. Esto en una Iglesia que, bajo los auspicios del Papa Francisco, está cada vez más atenta a las cuestiones relacionadas con la pobreza, el medio ambiente y los pueblos indígenas, como destacó el cardenal Leonardo Steiner, arzobispo de Manaos y presidente del Consejo Indigenista Misionero Nacional y del Regional Norte1.
Hablando de la Iglesia de Brasil, el presidente del CIMI destacó su apertura para asumir cuestiones sociales, políticas, indígenas y el apoyo de la Iglesia de Brasil al CIMI, como quedó patente en la cuestión del Marco Temporal. Aunque reconoció la necesidad de un apoyo aún mayor, Steiner afirmó que un buen número de obispos son sensibles a estas cuestiones.
Reconocer la dignidad y apoyar a los pueblos indígenas
El purpurado denunció la posición del Congreso Nacional brasileño, que se opone a las cuestiones indígenas, definiendo el momento actual como difícil, incluso para el diálogo. Según el presidente del CIMI, para el Congreso Nacional brasileño, los indígenas no tienen valor, no tienen dignidad. Ante ello, insistió en que como Iglesia "conocemos su dignidad y no tenemos miedo de apoyarlos".
En referencia al actual gobierno federal, el presidente del Regional Norte1 destacó la creación del Ministerio de Pueblos Indígenas y su apertura al diálogo. Un gobierno que recibe una fuerte presión social y política, con desprecio al Ministerio de los Pueblos Indígenas. En este sentido, el purpurado destacó la necesidad de que la Fundación Nacional Indígena (FUNAI) recupere su dignidad. También destacó la mayor organización de los pueblos indígenas y el compromiso del CIMI para ayudarles a conseguirlo.
Finalmente, el presidente del CIMI enfatizó el llamado del Papa Francisco a inculturar la liturgia y la espiritualidad introduciendo elementos indígenas, para que las comunidades tengan el alma de los pueblos indígenas. Por ello, llamó a los presentes a no abandonar nunca la causa indígena. Desde ahí recordó las palabras de Pedro Casaldáliga: "necesitamos tener una causa, aunque esté perdida", insistiendo en que la causa indígena no está perdida, que como Iglesia aprendamos de los pueblos indígenas, que los escuchemos, que estemos presentes, que los apoyemos.
Un gobierno que creó falsas expectativas
Los pueblos indígenas de Brasil fueron víctimas de una política dirigida contra ellos por el gobierno anterior, según Chico Loebens. El misionero del CIMI dijo que con el gobierno Lula se creó una expectativa muy positiva de que el gobierno daría espacio a la cuestión indígena, lo que no se confirmó. Incluso la cuestión yanomami al inicio del gobierno, fue una cuestión de emergencia, y aún no se ha estructurado una política permanente, dijo, afirmando que no se ha avanzado en la demarcación de las tierras indígenas.
Esto ante el enfrentamiento con el Congreso Nacional, tal vez el peor de los últimos años, según Loebens, quien insistió en la necesidad de la movilización como forma de hacer avanzar las cosas, en la necesidad de la fuerza política del Movimiento Indígena.
Violencia instaurada contra los indígenas
Partiendo de Laudato Si' y Fratelli tutti, Mons. Zenildo Lima, obispo auxiliar de Manaos, denunció el evidente avance de la violencia, que el Papa Francisco aborda en Fratelli tutti. Un proceso violento legitimado como pensamiento. Según él, Laudato Si' nos ha dado herramientas para avanzar en la lucha y compromiso por una política ambiental que considere a la naturaleza como sujeto de derechos, pero ha debilitado la política hacia los pueblos, con una defensa de los territorios que no implica una defensa de los pueblos, lo que debilita el concepto de ecología integral.
Ante esto, el reto para la Iglesia es pasar a un compromiso efectivo, que ahora es marginal y periférico, pues no es un tema central en nuestros procesos evangelizadores. Es una llamada a llevar los temas de la periferia al centro de nuestras discusiones. También denunció la existencia de un catolicismo reaccionario que apoya los ataques a los pueblos indígenas, lo que llama a reflexionar sobre el proceso de catequesis de la Iglesia en busca de la amistad social.
Decisión de exterminar a los indígenas
Asimismo, el obispo auxiliar de Manaos denunció la decisión de exterminio de las poblaciones indígenas, y reflexionó sobre la necesidad de estar presentes en el territorio virtual, un espacio dominado por grupos que invierten en él y consiguen construir narrativas en las que los pueblos indígenas son vistos allí como un enemigo a vencer.
Mons. Zenildo abordó la cuestión de los pueblos indígenas en el mundo urbano, y dijo que, en relación con el Rito Amazónico, algo que surgió con el Sínodo para la Amazonia, no es una cuestión de proclamación, de kerigma, sino de diálogo interreligioso, y que tiene que llevar a comprender su riqueza y a pensar en una Iglesia que pueda estructurarse de forma alternativa.
En cuanto a los pueblos indígenas, Mons. José Altevir da Silva, obispo de la Prelatura de Tefé, destacó que la Iglesia siempre ha estado y sigue estando del lado de los pueblos indígenas, hablando de la gran deuda de la Iglesia Católica con estos pueblos. Un trabajo de alianza entre la Iglesia en Roraima y los pueblos indígenas, que fue destacado por el obispo local, Mons. Evaristo Spengler. Raimundo Vanthuy Neto, obispo electo de la diócesis de São Gabriel da Cachoeira, dijo que siente el desafío de llegar a la diócesis más indígena de Brasil como alguien diferente, pidiendo oraciones por los pueblos del Río Negro y abriendo las puertas de la diócesis a todos.