Dame hoy tu paz Señor
A veces la vida te desborda… ahora toca remontar el vuelo, curar el ala herida porque hay ganas de seguir volando… ahora no son necesarias muchas palabras, hay la confianza en que el Señor nos acoge desde lo que vivimos, que está más cerca de nosotros de lo que a veces podemos pensar. En el bullicio interior, es hoy y ahora que necesito encontrarle, compartirle lo que cuesta y pedirle aquello que más anhelo: “Dame hoy tu paz Señor”, esa paz cuando hay olas que superar, esa paz del mar tranquilo para poder nadar e ir más allá, esa paz que ayude a caminar en fidelidad, por eso:
“Aquí estoy, Señor
dime a dónde caminar…”.
“Busco un instante en el recuerdo
que haga decirte lo que pienso
que no hay nada más que el tiempo
entre Tú y yo
que estoy solo en el silencio del perdón.
Di, solo Señor, las palabras en mi corazón.
Aquí estoy, Señor
vengo a hacer tu voluntad
dame Tu calor y la fuerza para amar.
Aquí estoy, Señor
dime a dónde caminar
dame de Tu pan, mi Dios
dame hoy tu paz Señor.
Guarda un segundo esto que llevo
todas las faltas que aún conservo.
El sendero que acompaña siempre a la verdad
es difícil recorrerlo sin quedar atrás
Sí, eres mi Dios, mi reflejo, eres mi ilusión” (“Habitaré” José Ibañez)
Hna. Ana Isabel Pérez.