El cardenal y el patriarca Bartolomé abrieron el Foro Interreligioso del G20 Ayuso: "El Papa nos ofrece en 'Fratelli Tutti' una terapia para terminar esta crisis mundial y prevenir otras en el futuro"

"Como está escrito en la Biblia, si una parte sufre, todas las demás partes sufren". El patriarca Bartolomé abrió anoche el Foro Interreligioso del G20 que se celebra, de forma virtual, en Riad, junto a medio millar de líderes religiosos y políticos. En su mensaje, el patriarca de Constantinopla reclamó "una acción política y un compromiso para combatir todas las formas de injusticias y desigualdad".

"2020 fue un año lleno de desafíos para muchas personas, debido al Coronavirus. Hemos visto morir a muchas personas y esta nueva situación ha empeorado la brecha entre ricos y pobres, el sistema de salud, a menudo ha impedido el acceso a las necesidades básicas, como la alimentación, el agua y la vivienda", lamentó Bartolomé, quien también criticó las muertes en el Mediterráneo, y el repunte del racismo en Estados Unidos.

His All Holiness @EcuPatriarch#G20interfaith: We will use this opportunity to raise our voice against structural inequalities – discrimination, racism, ethnocentrism. Policymakers need to know that we call for 0️⃣ tolerance of injustice & any other form of discriminatory practice pic.twitter.com/S0H1Qp46N4

— KAICIID (@KAICIID) October 13, 2020

"Nos gustaría recordar que la dignidad humana no tiene color, sexo, edad, etnia o religión. Todos tienen el mismo valor y, por lo tanto, todos deben ser respetados y tratados por igual como seres humanos", subrayó el líder ortodoxo, quien reclamó a responsables políticos y religioso que actúen con "tolerancia cero" ante "toda injusticia y discriminación". "El mundo de hoy necesita solidaridad, tolerancia y cooperación", personas capaces de "construir puentes" y "confianza", finalizó.

El mundo requiere respuestas

Por su parte, el cardenal Miguel Ángel Ayuso, presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, subrayó que "el mundo está pasando por un momento muy oscuro que requiere respuestas y soluciones adecuadas a los problemas de nuestra vida existencial".

"Hay una necesidad real de que la familia humana se reúna con un espíritu unificado y en verdadera amistad para ofrecer respuestas a nuestros problemas comunes. Nosotros, como líderes religiosos, debemos ser un contagio de esperanza", recalcó Ayuso.

La sesión plenaria fue inaugurada por Abdullatif Al-Sheikh, Ministro de Asuntos Religiosos del Reino de Arabia Saudita. Una verdadera cumbre convocada en la víspera del G20 de líderes políticos en Arabia Saudita, para un debate sobre la forma en que las tradiciones religiosas pueden colaborar con los gobiernos para combatir los desafíos de la Covid, la desigualdad y el cambio climático.

"Lo que el Papa Francisco nos ha propuesto a todos en la nueva encíclica 'Fratelli Tutti' es esencial si realmente queremos encontrar una 'terapia' apropiada para terminar esta crisis mundial y prevenir otra en el futuro. Os invito a uniros al Papa Francisco en esta aventura de promoción de la fraternidad y la amistad social", instó el representante de la Santa Sede. "De esta manera, podemos trabajar juntos para superar los desafíos que enfrenta la humanidad, con la esperanza de que nosotros, como líderes religiosos, podamos promover, apoyar y alentar a las comunidades y personas de todo el mundo a buscar sólo el bien común y la dignidad de cada persona humana".

El 80% de la humanidad, creyente

El congreso fue inaugurado por el secretario general de Kaiciid, Faisal bin Muaammar, quien destacó cómo "las organizaciones religiosas están profundamente arraigadas en el proceso de desarrollo mundial. Juntas poseen importantes recursos y son líderes en el ámbito de la educación. Para más del 80% de la población mundial, la vida se vive a través del filtro de uno u otro sistema de creencias".

"En muchas partes del mundo, donde los sistemas de gobierno, seguridad y alivio de la pobreza no existen o se han desmoronado, es el líder religioso o la organización basada en la fe la que representa la cohesión y el bienestar de la comunidad", subrayó Muaammar, quien pidió a los países miembros del G20 que "considere plenamente la inclusión del Foro Interreligioso" como "grupo de compromiso oficial" de las cumbres de los estados más ricos del mundo.