"Creo que la libertad no puede ser absoluta", explica el presidente del episcopado europeo Cardenal Hollerich: "Todos los europeos debemos decir con firmeza que no nos dejaremos vencer por el odio y la violencia"
“El objetivo de los terroristas es dividir a Europa, fortalecer las fuerzas de ultraderecha y populistas, fuerzas que fomentan la división, distanciando a Europa de sus valores fundacionales"
"En general Europa es un éxito de la convivencia y eso perjudica a los terroristas. No pueden soportar que este proyecto, basado en valores comunes, sea posible y por eso nos atacan"
"Creo que la libertad no puede ser absoluta. Creo que la libertad de expresión también debe tener en cuenta lo que piensan los demás, sus sentimientos, especialmente los religiosos"
“Creo que los terroristas pueden haberse aprovechado este momento de fragilidad que estamos viviendo. La gente en Europa está angustiada"
"Creo que la libertad no puede ser absoluta. Creo que la libertad de expresión también debe tener en cuenta lo que piensan los demás, sus sentimientos, especialmente los religiosos"
“Creo que los terroristas pueden haberse aprovechado este momento de fragilidad que estamos viviendo. La gente en Europa está angustiada"
Responder al mal con el bien o, como dice el cardenal Jean-Claude Hollerich, presidente del episcopado europeo, “que la fraternidad sea nuestra respuesta al mal del terrorismo”. En una entrevista de M. Chiara Biagioni, de la agencia SIR de los obispos italianos, el presidente de la COMECE, advierte que, ante el terrorismo, lo que debe hacer Europa es una mayor unión, no caer en el odio y vivir la fraternidad, uno de los valores fundantes del proyecto europeo.
“Si el objetivo de los terroristas es dividirnos, nosotros, todos juntos, países de la Unión Europea pero también cristianos, ateos, agnósticos, musulmanes, judíos, debemos decir no. Debemos decir con firmeza, que no nos vencerá el odio. Que, por el contrario, queremos vivir los valores que hicieron posible el proyecto europeo. Queremos vivir la fraternidad de la que nos habló el Papa Francisco. No nos dejaremos vencer en este punto", explica.
El cardenal Hollerich está convencido de que el objetivo final de los atentados terroristas de París, Niza y Viena es “dividir a Europa, fortalecer las fuerzas de ultraderecha y populistas, fuerzas que fomentan la división, distanciando a Europa de sus valores fundacionales".
Preguntado, ¿por qué tanta ira contra Europa?, el arzobispo de Luxemburgo, contesta: “Porque Europa muestra al mundo que el fanatismo no tiene sentido. Porque Europa es un continente en el que poblaciones muy diferentes han logrado convivir, acordando valores comunes. Porque trabajamos por la ciudadanía en la Unión Europea y logramos construirla, derribando los muros nacionales que dividían a los pueblos. Además, Europa también está habitada por muchos musulmanes y personas de otras creencias, y hemos demostrado que es posible vivir bien juntos. Por supuesto, hay grupos, por ejemplo en los suburbios de las grandes ciudades francesas, donde la gente no ha logrado integrarse, pero en general Europa es un éxito de la convivencia y eso perjudica a los terroristas. No pueden soportar que este proyecto, basado en valores comunes, sea posible y por eso nos atacan”.
Asegura, asimismo, el purpurado que la culpa de los atentados no es de la emigración ni del Islam.
“Y puedo demostrarlo con muchos ejemplos. Después del atentado de Niza, la Unión de Musulmanes de Luxemburgo me escribió inmediatamente una carta. Querían expresarme, como cabeza de la Iglesia Católica de nuestro país, todo su horror ante ese acto de barbarie. Incluso el Imán de Burdeos dejó claro que Mahoma habría sentido vergüenza ante el atentado de Niza, recordando que Mahoma fue criticado muchas veces a lo largo de su vida, pero nunca se tomó en serio esta crítica y no se enfadó”.
Pero no por eso 'bendice' las caricaturas de Mahoma. "Creo que la libertad no puede ser absoluta. Creo que la libertad de expresión también debe tener en cuenta lo que piensan los demás, sus sentimientos, especialmente los religiosos. Y aquí creo que es bueno recuperar la encíclica del Papa Francisco 'Fratelli tutti' porque muestra, también a Francia, que la libertad sólo puede ejercerse junto con la fraternidad, de lo contrario no hay igualdad”.
La periodista quiere saber si, a su juicio, existe una correlación entre el terrorismo y la pandemia. Y el cardenal cree que sí. “Creo que los terroristas pueden haberse aprovechado este momento de fragilidad que estamos viviendo. La gente en Europa está angustiada. Está confinada dentro de sus casas. Tiene miedo. No está bien.Y la enfermedad sigue circulando. La muerte está llegando a las familias. Sabemos que la ansiedad puede convertirse en agresión. Pero eso es, exactamente, lo que los terroristas quieren. Quieren la división de la sociedad europea”.
De ahí que, para el cardenal, la respuesta de Europa ante esta barbarie debería ser la siguiente: “En primer lugar, debe ser una respuesta unida, es decir, debe tener la voz de todos los países de la Unión, de todos los cristianos, ateos, agnósticos, musulmanes, judíos. Todos juntos debemos decir que no. Debemos decir con firmeza que no nos dejaremos vencer por el odio y la violencia. Por el contrario, queremos vivir los valores que hicieron posible el proyecto europeo. Queremos vivir la fraternidad de la que nos habló el Papa Francisco. No nos dejaremos vencer en este punto”.