Este martes 19 de marzo ha dado comienzo en Vitoria Gasteiz la octava edición de la Conferencia Global sobre Agricultura Familiar, un evento  internacional que reunirá a más de 200 participantes llegados de 55 países. Esta  cumbre busca debatir sobre los desafíos que enfrenta la agricultura familiar en el  mundo y plasmar las propuestas para asegurar la sostenibilidad económica, social y  ambiental del planeta. 

La dirección de esta conferencia internacional invitó al Papa Francisco a  participar como voz autorizada y reconocida en todo el mundo. Por agenda, al ser la  festividad de San José, el pontífice no ha podido asistir ni participar de manera telemática al  tener varias citas en Roma. Por ello, la Santa Sede ha confiado la lectura de su mensaje  y su representación en esta cumbre mundial al Obispo de Vitoria, Juan Carlos  Elizalde. 

Juan Carlos  Elizalde ha trasladado la reflexión pontificia a los altos representantes de organizaciones  internacionales, líderes gubernamentales, investigadores, académicos y agricultores de  todo el mundo. 

Reproducimos a continuación algunos párrafos del mensaje del Papa Francisco

“Las familias que se dedican a la agricultura son encomiables por la forma solidaria de su trabajo así como por el estilo respetuoso y delicado con el que cultivan la tierra”.

Francisco ha destacado que estas “son clave para hacer que los sistemas agroalimentarios sean más inclusivos, resilientes y eficientes”. En sus palabras, ha lamentado que “su protagonismo en el progreso de sus pueblos y su considerable aporte en la producción global de alimentos siguen siendo golpeadas por la pobreza y la escasez de oportunidades”.

En otro párrafo el pontífice dice: “los pequeños agricultores tienen la cercanía de la Iglesia” y ha reiterado “la llamada a prestar atención a sus necesidades humanas, espirituales y sociales, además de las propiamente técnicas”.

Francisco señala que “la empresa familiar es el lugar al que pertenecen las personas, aquel espacio en el que se sienten comprendidas y valoradas en sí mismas por su dignidad y no únicamente por lo que producen o por los resultados que consiguen”. En esta misma línea ha destacado “la importancia de fortalecer los vínculos que unen a sus miembros, de respetar sus tradiciones religiosas, depósitos culturales y prácticas agrícolas”.

Francisco ha resaltado “el papel insustituible del genio femenino en este contexto” donde "las mujeres rurales representan una brújula segura para sus familias, un punto de apoyo firme para el progreso de la economía, especialmente en los países en desarrollo, donde no sólo son beneficiarias sino verdaderas impulsoras del progreso de las sociedades en las que viven”. Igualmente, el Papa ha dedicado palabras a los jóvenes agricultores. “La verdadera revolución para un futuro alimentario comienza con formar y potenciar a las nuevas generaciones”. Ha añadido además que “el regalo que los jóvenes nos proporcionan consiste en aportar soluciones innovadoras para abordar viejos problemas y en la valentía para no dejarse limitar por un pensamiento miope que se resiste a cambiar”.

En sus últimas palabras leídas por el Obispo de Vitoria, el Santo Padre ha otorgado su bendición los presentes y los trabajos de estos días "para que, reconociéndose el papel de la familia rural, avancemos en la erradicación del hambre, la reducción de las desigualdades y el cuidado y la salvaguarda de nuestro planeta”.

Tras leer la carta firmada por Francisco, el Obispo de Vitoria ha agradecido nuevamente a la organización su invitación y ha deseado que este encuentro tenga muchos frutos por el bien del sector del campo en particular y de toda la sociedad en general, recalcando la cercanía y el apoyo de la Iglesia a las gentes y familias del campo.

El Foro Rural Mundial es una red no gubernamental que promueve la Agricultura  Familiar y el Desarrollo Rural Sostenible. Está compuesta por las principales  federaciones y organizaciones internacionales de la Agricultura Familiar así como  cooperativas y centros de investigación agraria que representan a más de 35 millones  de agricultores familiares en los cinco continentes. 

La cita que ha comenzado este martes en Vitoria Gasteiz se prolongará hasta el 21 de marzo, día en  que el Lehendakari, Iñigo Urkullu, y el Ministro de Agricultura, Luis Planas, intervendrán  para su clausura. Esta cita llega en un clima de protestas del campo por todo el país y  por otras partes del mundo, por lo que su relevancia cobra aún más significado. El  Obispo de Vitoria, en medios de comunicación diversos, ya ha manifestado su cercanía  con los agricultores ante sus protestas. 

Non solum sed etiam 

Se da la circunstancia que en estos días hay instalada en una de las naves laterales de la Catedral Nueva de Vitoria una exposición de sensibilización ciudadana sobre el cambio climático con datos sobre consumo sostenible, trazabilidad de los alimentos y de los productos de consumo y propuestas de acciones individuales para frenar el cambio climático. Esta exposición ha sido organizada desde el Secretariado Social Diocesano y la Comisión de Ecología Integral de la Diócesis. Esta misma comisión tiene organizada una charla para el jueves 21 con José Antonio Armolea (IHOBE) a cuenta de la reciente “Ley de Transición energética y Cambio Climático” aprobada en el Gobierno Vasco.

La Diócesis de Vitoria ha sido una de las pioneras en la adaptación de los consumos de energías renovables en las parroquias así como en la acogida y estudio de la encíclica Laudato Si del Papa Francisco.