#sentipensares SOLA CONTRA EL MUNDO
Se fue sin dejar rastro, haciéndola sentirse culpable.
| Vilma Patricia Fonseca Arevalo
Con los brazos cruzados, se quedó en silencio,
Sin decir ni una sola palabra,
Con la mirada baja, la cabeza agachada.
Sintiéndose juzgada, con la culpa sobre su espalda,
Se sentía señalada, se sentía abandonada,
Se sentía avergonzada, se sentía confundida
Se sentía perdida, se sentía que no valía nada.
El tiempo se le escapó como agua entre las manos.
Se fue sin dejar rastro, haciéndola sentirse culpable.
Lloraba todo el dia, de no haberlo atendido,
Como el se merecia, eso fue lo que él le dijo.
Cuando se fue con otra, la inseguridad corrompía el alma
De dudas de que diría la gente,
Especialmente su familia, especialmente la familia de él.
Pero más que todo sus hijas y sus hijos.
Sin saber qué les diría, cuando le preguntaran
Porque su padre les abandonó.
Pero lo más le ardio, lo que más la ofendió,
Es que la dejó por otra.
No importa si más joven, no importa si mas vieja,
No importa si mas bella, no importa si mas fea.
El caso es que la dejó.
En que me equivoque, se preguntaba ella,
Si le dio los mejores años de su vida,
Si le entrego su juventud,
Dedicada solo a él y a sus hijas e hijos,
Dedicada a su casa, se olvidó de ella misma.
Y así pasaron algunos años
Hasta que el la dejo por otra,
Ahora se decía, ella no sabía.
Encontró en Dios su refugio
Lloró ante su imagen, y el consoló su alma.
Y en su infinita misericordia,
La animo a seguir viviendo.
Busco apoyo en grupos, para desahogar su alma.
Le levantaron el autoestima, se recobró a sí misma.
Ya no le importaba lo que dijera la gente,
Solo para criticar sirve, pero no ayudan en nada.
Después de ese sufrimiento, ella llego a comprender
Que el primer amor de una mujer,
Debe de ser el de ella misma,
Y que la mejor manera en que una mujer
Puede rehacer su vida, es reivindicarse con ella misma.
Ahora disfruta de su propia existencia,
Se vale por sí misma.
Ahora, no vive en función de la opinión ajena
Y menos de la masculina.
Ahora se siente liberada, ahora se siente empoderada.
Ahora entendió, que él le hizo un gran favor al dejarla,
Pues hizo que se encontrara consigo misma,
Porque hay pérdidas que son ganancias.
El tiempo pasó, y recobró su esperanza.
Ahora el regresa, después de tanto tiempo
A buscar su apoyo, pero ella ya no lo quiere;
Tampoco sus hijas y sus hijos.
Ni la otra, lo quiere ahora
Como hombre inútil, buscó a su madre.
Ella puso su propio negocio, trabaja por su cuenta.
Ahora sabe que vale mucho.
Ya no necesita de su dinero y menos de su apoyo moral,
Pues no lo tuvo, cuando se fue con otra.
Dejándola sola contra el mundo
Sus hijas y sus hijos, fueron su aliento
Para seguir adelante, y el amor de Dios
Que es infinitamente incondicional
Guatemala