La más importante noticia del año
He leído estos días que la búsqueda de la noticia más mala tiene un trasfondo teológico, pues se relaciona de algún modo con el bien supremo. Lo absolutamente malo hace relación inevitable con lo absolutamente bueno. Pero nada es del todo malo, pues tanto detrás de lo bueno como de lo malo está siempre la libertad humana salvando siempre de alguna manera de la absoluta malicia. En torno a estas ideas hacía equilibrios en El País (27 Diciembre 2015) el para mí desconocido filósofo José Luis Pardo.
La búsqueda de la noticia más importante del año tiene también que sectorizarse, pues resulta prácticamente imposible comparar una noticia política con una deportiva, o una del mundo del glamour con otra de temas económicos. Es muy difícil un hecho noticiable que trascienda todas las diferencias provenientes de los distintos sectores de la sociedad. La selección de las noticias importantes, además, puede estar contaminada con el deseo de dar prevalencia a hechos o tendencias que el que hace la selección quiere sobredimensionar, y por ello se diferencian tanto unos de otros los números de los periódicos dedicados en los días finales del año a compendiar lo más importante del año.
A pesar de todas estas dificultades, hay ciertos acuerdos comunes. En distintos medios he encontrado la información de que una Fundación -cuyo nombre no recuerdo- ha acordado al final del año que termina que la palabra del 2015 es concretamente REFUGIADOS. Sin duda este término alude a uno de los grandes temas del año. La foto del pequeño Aylán, muerto y acariciado por las olas en una playa de Turquía (y la del soldado con el niño en brazos, sacándolo de la playa), están en todos los resúmenes gráficos del 2015. Y las fotografías de autenticas masas de emigrantes entrando por las fronteras de los países del Oriente Europeo han estado también siempre presentes, impresionando a los que las contemplan. Al ver estas fotografías, se recuerda con razón el dicho tan repetido de que una imagen vale más que mil palabras.
Más lejanas están también las imágenes del Papa Francisco en Lampedusa, intentando concienciar al mundo de la globalización de la indiferencia ante el tema de la emigración. Intentando superar la indiferencia, la atención por lo cercano e inmediato olvidándonos de lo lejano y más importante, dirijamos la mirada en este final del año y el comienzo del siguiente a esos millones ya de emigrantes, que han tenido que abandonar sus hogares en búsqueda un porvenir todavìa muy incierto para ellos. Frente a otros temas también importantes, coloquemos la emigración como la noticia más importante de año.