En su decimosexto día de hospitalización, y tras la crisis vivida ayer, el Papa Francisco ha reanudado la actividad de forma normal, tal y como apuntan fuentes vaticanas. Así, Bergoglio no ha vuelto a tener más crisis, se ha despertado, ha leído la prensa y ha desayunado. Como curiosidad, el pontífice ha tomado café y toma alimentos sólidos.
Desde el Gemelli, se hace hincapié en que el broncoespasmo vivido anoche es diferente a la que sufrió el pasado sábado.
En cuanto a la ventilación mecánica, fuentes vaticanas apuntan a que no es invasiva, y el Papa se puede mover con total normalidad. No está, pues, intubado, ni postrado en la cama.
Con todo, prosigue la fisioterapia respiratoria, como ejercicio constante para aumentar la oxigenación y ayudar a la respiración. El cuadro clínico sigue siendo complejo, el pronóstico sigue siendo reservado, a la espera del parte de la tarde y los resultados de nuevas pruebas. Una mañana tranquila después del gran susto de la tarde del viernes.