(RV).- Al conocer la noticia del fallecimiento de su amada hermana Assunta - se lee en el telegrama - le doy mi sentido pésame por el grave luto suyo y de su familia, asegurando mi cercanía espiritual en esta hora de prueba.
Y mientras elevo al Señor, dador de toda recompensa, fervientes oraciones de sufragio para que acoja a la querida difunta en la eterna alegría, invoco por todos los familiares la esperanza cristiana y envío, como signo de mi intensa participación en el gran dolor de Su Eminencia y de sus familiares una especial y confortadora Bendición Apostólica.