Alrededor de las 10:30 horas (tiempo local) ayer viernes, un hombre irrumpió en la Basílica de San Pedro, en Roma, y vandalizó el Altar de la Confesión, ubicado bajo el Baldaquino de Bernini.

Además, arrojó al suelo seis  candelabros de 1865 valorados en 30 mil euros, así como el  mantel de lino sobre el que reposaban.

El sujeto, de 40 años y de origen rumano, fue detenido por elementos de la  gendarmería vaticana para posteriormente trasladarlo a la comisaría.

Más tarde, se informó que el hombre fue  denunciado penalmente por daños y posteriormente puesto en libertad, aunque no se excluye la posibilidad de que le impongan la prohibición de residir en Roma.