Hemos perdido el valor de la PALABRA
Me da la impresión que ante este tópico, perdemos la ilusión, lo evidente de su significado.
Todos conocemos también a quienes utilizan la palabra para combatir su ego, porque se siente el mejor y necesita ser escuchados. Es otra de las formas de su utilidad, pero quizá sea el momento de empezar a pensar antes de hablar, de lo contrario acabaremos con las palabras, algo tan importante para nuestra comunicación.
¿Alguien recuerda la última palabra o huella que le llegó al corazón, que le marcó o ayudó?, quizá si alguien lo hace, estemos hablando de un pasado muy lejano, porque eso por desgracia, forma parte de eso, del pasado…
Estoy convencida que merece la pena volver a recuperar la PALABRA, con mayúsculas, junto con su verdadero sentido.
Ojalá esta pequeña aportación compartida con todos vosotros nos haga reflexionar y dejemos de parecernos a los políticos, siendo capaces de volver la mirada a esa persona que tenemos más próxima o cercana y hemos dejado de creer en ella.