Un sacerdote, abusado en su niñez por sus propios 'hermanos', interpela al III Capítulo de los Pasionistas de España Padre Toño: "Atrévanse a romper la cultura del silencio actual y asuman el reto de escuchar y acercarse a sus Víctimas"

LOS PASIONISTAS: UNA DECADA DE NEGACIONISMO, OCULTAMIENTO, ENCUBRIMIENTO, INACCIÓN ANTE EL ABUSO SEXUAL DE UNA VICTIMA 

La nueva Curia provincial: ¿Continuismo de la impunidad, del silencio y de la victimización?

Imagino que el tema de las víctimas de abuso sexual y sus desafíos ha estado ausente en el debate y análisis del III capitulo provincial de los Pasionistas Españoles, extendidos en algunos países y regiones de América Latina. Como pasionista durante más de 15 años y otros 30 viviendo en conventos de la congregación, no solo conocí en carne propia el desgarro de ser abusado por sacerdotes pasionistas y sufrir las consecuencias psicológicas y el profundo dolor  de asumirme como  un niño abusado, sino que también conocí formas impunes de tratar y ventilar los casos de abuso sexual por dichos sacerdotes, en donde hicieron hasta lo imposible por negarme un dialogo y aceptar  y respetar el proceso psicológico en el cual por voluntad y decisión personal me sometí.

En ninguno de ellos por desgracia se abrieron canales de dialogo, justicia, verdad y reparación a las víctimas. El “modus operandi” de las dos curias integradas por el primer provincial de la nueva provincia SCOR (PROVINCIA DEL SAGRADO CORAZON EN ESPAÑA Y PAISES DE AMERICA LATINA) ha sido ocultar, tergiversar y cerrarse al diálogo con las víctimas y a la construcción de un camino de perdón, reconciliación y prevención de los abusos al interior de las obras y presencias de los pasionistas SCOR. Imagino que, por continuar ocultando este serio problema, la respuesta del Capitulo presente es la ausencia de su abordaje y la negación del acceso al dialogo, a la justicia y la reparación a las víctimas de abusos sexuales por sacerdotes y religiosos pasionistas.

Imagino también el interés por continuar con una curia provincial dominada por religiosos de la ex provincia de Madrid y amigos que continúen la política de impunidad anterior. Un continuismo que tendrá gravísimos costos. Los invito a que se atrevan a romper la cultura de silencio actual y asuman el reto de escuchar y acercarse a sus Víctimas.

Hacia un Futuro sin miedo a las VICTIMAS Y SOBREVIVIENTES DE ABUSO SEXUAL

Creo que ningún capitular ni miembro de la provincia han presentado una propuesta para nombrar una comisión independiente y construir un camino para que la provincia de los pasionistas SCOR pida perdón y elabore y ponga en práctica un protocolo de prevención de la violencia sexual contra la niñez en sus instituciones, organizaciones y espacios en las diferentes comunidades de la provincia. 

En la provincia Scor, son muchos los sacerdotes que han participado en esta cruel realidad, abusando de niños y niñas, así como son muchos los sacerdotes con mujeres e hijos tratados con impunidad, incluso elevados a cargos importantes de la congregación. Alguno incluso formó parte de la curia provincial que termina. Por ello es importante asumir el problema, encargarse de esta difícil situación y asumir sus consecuencias, especialmente en lo que atañe a las VICTIMAS.

¡No tengan miedo a las víctimas! Estamos para ayudar a construir un camino de Perdón y Reconciliación y apoyar en la puesta en marcha de un Protocolo de prevención en las comunidades, como espacios para que las víctimas del pasado y las actuales podamos presentar nuestros casos y ser resarcidos en los graves daños psicológicos que nos acompañan para toda la vida. El provincial que terminó hace días conoce esta realidad desde noviembre del año 2013 y otros miembros de sus curias también. Lastimosamente se han dedicado a mentir y se han cerrado a abrir los espacios de diálogo que hemos solicitado de forma reiterada, incluso negándose a apoyar los tratamientos psicológicos que han sido indispensables para seguir viviendo, literal y espiritualmente. 

Los pasionistas deben de ser expertos en la “MEMORIA PASSIONIS” no sólo como vía para recordar un acontecimiento histórico pasado (Cons 65) sino para actualizar la memoria desde las víctimas y los crucificados actuales. Es decir, los pasionistas deben estar con las Victimas. Eso mismo han querido celebrar en su Tercer Centenario de fundación recién concluido. Todo ello es banal si no dan pasos concretos para reconocer a sus propias VICTIMAS y escuchar la memoria de la pasión en los cuerpos sagrados de los niños violados en sus conventos.

Estuve y fui un niño interno desde los seis años en conventos pasionistas: 5 años en la Escuela Hogar “Cristo de la Luz” de Daimiel (Ciudad Real) y 10 años en el Seminario San Gabriel de la Dolorosa de Zuera (Zaragoza) en donde viví el desgarrador sufrimiento de mi abuso sexual, entre otros.  Agradezco a muchos compañeros solidarios que me han escuchado e incluso agradezco al Arzobispo de El Salvador quien me escuchó, se solidarizó con mi experiencia e incluso pidió perdón y lamentó las actitudes antievangélicas que han asumido y con las que han tratado este tema las dos curias provinciales y algunos consultores generales -incluso religiosos- que sin escrúpulos han continuado profundizando la impunidad con maldad.

Como sacerdote y victima de abuso sexual por otros sacerdotes les puedo ofrecer el perdón y un proceso de reconciliación. Durante el proceso psicológico que fue el tiempo de mas de 3 años de sanación tuve la experiencia de sentir la rabia y la indignación y la pregunta que todavía me hago ¿por qué a mí? Es una pregunta que me acompaña y todavía en muchos días siento la soledad y el dolor de haber sido abusado y violado por hermanos y compañeros sacerdotes en mi tierna edad, en mi niñez. 

Conozco que fueron más los niños abusados a los que no encuentro después de más de 30 años, pero a los cuales invito a perder el miedo y la vergüenza de sentirnos víctimas. Los únicos que tienen que tener vergüenza son los abusadores y encubridores, que cubiertos en sus ropajes sagrados se sienten impunes en una iglesia y una sociedad que los protege, encubre y tapa hasta que sus delitos prescriben. 

¿PUEDE HABER ESPERANZA?

Es una oportunidad para las víctimas que se abran espacios para el perdón, la reconciliación y la reparación, aunque tengo muy poca esperanza que la nueva curia sea capaz de construir un camino de esperanza para las víctimas y goce de la madurez que requiere asumir con valentía la “Memoria Passionis” de sus propias víctimas de abuso sexual.   

PERDON

A pesar de todo y del dolor que todavía siento, les doy mi bendición sacerdotal como víctima y sobreviviente y a la vez la autoridad para compartir mi sufrimiento, mi historia de pasión y muerte. Ser abusado es vivir como muerto. Pero mantengo la Esperanza en una nueva iglesia que renazca del dolor de sus víctimas. 

DEMANDO COMO VICTIMA Y SACERDOTE:

1.- Abrir espacios de dialogo para escuchar el clamor y sufrimiento de las víctimas de Abuso sexual y reconstruir las vidas rotas por las violaciones. Convocar a las víctimas, escucharlas, creer sus testimonios, reconocerles su autoridad. PERDER EL MIEDO A LAS VICTIMAS, que están sufriendo las consecuencias destructivas de su personalidad, de su dignidad, muchas veces irreparables.

2.- Trabajar juntos EN MEDIDAS DE REPARACIÓN Y RESARCIMIENTO para reconstruir la humanidad destruida por los abusos cometidos en su niñez y las consecuencias. Corregir su actitud inmisericorde ante las víctimas y practicar la compasión entendida como identificarse con ellas, ponerse de su lado, hacer suyos los sufrimientos, ayudar a curar sus heridas conforme a la parábola del Buen Samaritano, ejemplo ético de com-pasión, atención y cuidado de la víctima, hoy de abuso sexual. 

3.-Nombrar una Comisión para la elaboración de protocolos de prevención de la violencia y abuso hacia la niñez en las comunidades pasionistas de la provincia. 

4.- Fortalecer los controles de ingreso y formación del nuevo clero y religiosos. Fortalecer métodos profesionales psicológicos en sus procesos formativos. 

4.- Abrir canales para la denuncia, que garanticen la confidencialidad y asegurar equipos que investiguen y den respuesta a las violaciones del presente. 

Y otros que ustedes consideren importantes para construir desde las victimas un nuevo futuro en la Iglesia y sus comunidades, libres de acoso y abuso sexual por miembros de sus instituciones.

SUEÑO CON UN ENCUENTRO CON EL PAPA FRANCISCO

A mis 32 años tome conciencia de haber sido abusado y comenzó mi siquismo y mi conciencia a despertar, que durante años, como mecanismo de defensa, anuló la experiencia de dolor. Fue a los 25 años que comencé a soñar con la experiencia de abuso y en los sueños aparecían de nuevo los rostros y las desgarradoras imágenes de violaciones sexuales en mi cuerpo por parte de sacerdotes.

Era para mi muy doloroso y lloré y sigo desgarrado, pensando como un niño seminarista y luego sacerdote hijo de la Iglesia y hermano pude haber sido violado y ser victima de mis propios hermanos, quienes me tenían que proteger en mi infancia y niñez. Durante años era el miedo a no ser creído y someterme a un escarnio eclesial. Efectivamente, después de romper el silencio mi experiencia ha sido de constantes amenazas y discursos antievangélicos por parte de los superiores de la congregación. En ningún momento he tenido la gracia de ser escuchado y perdonado. 

 Igual que soñé y sueño con la experiencia de ser llamado y recibido por el Papa Francisco para que escuche mi experiencia y las propuestas que en este testimonio ofrezco. Como sacerdote y teólogo solicito el perdón del Santo Padre Francisco. Me gustaría poder encontrarme con él, para ofrecernos el perdón y asumir un camino de justa reparación. 

Espero el encuentro con el Papa.

“MEMORIA PASSIONIS” DE UNA VICTIMA DE ABUSO SEXUAL EN EL SENO DE LA IGLESIA

P.Toño

Un sacerdote sobreviviente de abuso sexual del clero en periodo de seminarista menor Pasionista (10-16 años de edad) y miembro de 'Infancia robada'.