"¡Qué clericales!". Así define el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, a los que demuestran "alborozo" ante el "presunto apoyo del Papa a las uniones homosexuales".
En un hilo de Twitter, el obispo auxiliar de Valladolid achaca a las revoluciones del 68, "con el amor libre", el comienzo del "proceso de desinstitucionalización de la familia", insistiendo en que "más tarde se pide que las relaciones “libres y abiertas” no sufran discriminación".
"Así registro de parejas de hecho, uniones civiles y matrimonio igualitario. A la vez quieren no ser y ser", sostiene el prelado, que deja claro el error, en su opinión, de esta visión. "Como si ser matrimonio solamente la unión estable de hombre y mujer capaz de engendrar vida y formar familia no perteneciera al sentido común de la gente desde siglos", concluye.