Un punto y seguido, esa es la principal lectura de una Asamblea Sinodal que ha clausurado los trabajos de su primera sesión en la noche de este sábado. Ese punto y seguido se puede entender en lo ocurrido en el momento de clausura, cuando después de la votación del Informe de Síntesis, Francisco, muy parco en palabras, en lo que se puede entender un mensaje a ver este final de los trabajos como un paso a más, no decisivo, en un proceso que continua, se limitó a decir que nadie se olvide que el protagonista de ese camino es el Espíritu Santo, agradeciendo a quienes han hecho posible llegar hasta aquí, también aquellos que no aparecen.

Un Sínodo que ha conquistado espacios

Un Informe de Síntesis, del que se han aprobado todos los puntos con más de dos tercios, siendo el capítulo 9, sobre las mujeres en la vida y la misión de la Iglesia, especialmente lo referente al diaconado femenino, y el 11, que trata sobre los diáconos y presbíteros en una Iglesia sinodal, en ese caso los puntos referentes al celibato, de nuevo el diaconado femenino, y la posibilidad de acoger a los presbíteros que han dejado el ministerio.

“Un sínodo en el que hemos conquistado espacios”, insistió el cardenal Grech, para quien “la mayoría de las personas han generado espacios para que cada uno pueda entrar en su corazón”, algo que es fruto de una escucha recíproca. Una asamblea en la que poco a poco se fue derritiendo el hielo, dada la generosidad por parte de los miembros, según el secretario del Sínodo y eso ha permito abrir espacios, en un proceso que no se concluye hoy. Grech habló de una Iglesia en salida, que está creando espacios para todos, sin excluir a nadie, y eso porque esa es la actitud de Jesús, para que nadie no se sienta aceptado en su casa.

Ha cambiado la mentalidad de algunos

La Asamblea Sinodal ha ayudado a cambiar la mentalidad de algunos participantes, según el cardenal Hollerich, que destacó la importancia de los círculos menores en ese proceso, lo que ha permitido crear una comunidad de discípulos y llevar a entender lo que hubiera hecho Jesús. En palabras del Relator General del Sínodo, “las personas volverán con su corazón lleno de muchas ideas”.

Por su parte, el padre Giacomo Costa destaco que un sentimiento de Iglesia ha hecho salir unidos en el Espíritu Santo, un resultado que al principio no era evidente, dadas las diferencias que existían. Para el secretario especial, es posible en la diversidad de iglesias, lenguas, culturas, caminar juntos, lo que es un mensaje de esperanza, algo que puede llevar frutos a la Iglesia.

Llevarlo de vuelta a las iglesias locales

Un documento que deberá ser comunicado a las iglesias locales, con los puntos en acuerdo y aquellos en los que hay que recorrer todavía un camino, insistió Grech. Independientemente de los resultados de la votación, que es algo que no preocupa a Hollerich, dado que se sabía que había temas que encontrarían oposición, llegando a decir que se preveía incluso mayor oposición en algunos temas. De hecho, somos una familia y debemos respetar los pasos de cada uno, pues sinodalidad es caminar todos juntos y no es un espacio en el que el que habla más fuerte gana, destacó el cardenal Grech.

Se busca profundizar en la capacidad de escucharse unos a otros, un clima único creado en las mesas, dando pasos importantes quienes eran reacios, en palabras de Giacomo Costa. Según el jesuita, hay que entender la conversión en el Espíritu, que es buscar juntos la voluntad de Dios, lo que ayudó a encarar los temas, a lo que se unió el trabajo de teólogos y canonistas. Pero hay muchos temas que no sería realista encararlos bajo todos sus aspectos en un mes de trabajo, y por eso dos sesiones, una para abrir el camino y otra para seguir caminando, afirmó. Ante eso pidió que el Espíritu pueda intervenir, pues el paso sucesivo se hará a partir de las prioridades que se irán elaborando y a partir de ahí se entablará una conversación en el Espíritu para profundizar desde el punto de vista teológico, canónico y pastoral.

Esta es una etapa de aprendizaje para todos, según el secretario del Sínodo, para quien debemos implementar lo visto y seguir adelante con un discernimiento, resaltando el entusiasmo de los participantes y su deseo de compartir lo vivido. De hecho, el Informe de Síntesis, en palabras de Hollerich, el documento es la base común para dejar que el Espíritu construya algo. Este es un documento que es parte de un proceso que se iniciará cuando concluya el Sínodo, por lo que el Relator General del Sínodo espera que el próximo año haya un documento en el que se hable de la sinodalidad desde el punto de vista teológico. Señalando que hubo otros temas importantes para algunas personas, afirmó que en una Iglesia sinodal habrá mayor capacidad de hablar de estos temas, se garantizará la libertad de expresión. Por eso concluyó que la Iglesia va a encontrar respuestas gracias a este cambio, que pondrán de acuerdo con la mayoría.