República Centroafricana sufre una situación muy compleja Obispos centroafricanos advierten: "La crisis alimentaria está a nuestras puertas"
"La crisis alimentaria amenaza a la República Centroafricana", advierte la Conferencia Episcopal en su mensaje final al concluir su Asamblea Plenaria
"La situación se agrava por la escasez de combustible. La vida social está supeditada a la oferta con largas colas de vehículos, tensión y, en consecuencia, deplorables escenas de violencia"
"República Centroafricana sufre una situación muy compleja debido a la presencia de varios grupos guerrilleros, soldados extranjeros (ruandeses) y mercenarios rusos"
"Invitamos a todos los bautizados a ser verdaderos artífices del Sínodo y a difundir sus frutos en sus ambientes. Caminar juntos es promover una cultura y una civilización de paz y amor que triunfe sobre el odio, los celos y el miedo al otro"
"República Centroafricana sufre una situación muy compleja debido a la presencia de varios grupos guerrilleros, soldados extranjeros (ruandeses) y mercenarios rusos"
"Invitamos a todos los bautizados a ser verdaderos artífices del Sínodo y a difundir sus frutos en sus ambientes. Caminar juntos es promover una cultura y una civilización de paz y amor que triunfe sobre el odio, los celos y el miedo al otro"
(Agencia Fides).- La crisis alimentaria amenaza a la República Centroafricana, advierte la Conferencia Episcopal en su mensaje final al concluir su Asamblea Plenaria. “En algunas ciudades tememos una crisis alimentaria por la destrucción de los campos y el robo de bueyes”, aseguran los obispos en el documento enviado a la Agencia Fides. La situación se agrava por “la escasez de combustible que el país ya soporta con mucha dificultad y que provoca un aumento vertiginoso de los precios de los alimentos y productos de primera necesidad cuyos stocks van disminuyendo”. “La vida social está supeditada a la oferta con largas colas de vehículos, tensión y, en consecuencia, deplorables escenas de violencia. Tememos que las muertes se multipliquen en los hospitales, así como la falta de primeros auxilios y asistencia a los enfermos”, advierten los obispos.
La situación en Ippy, tristemente, refleja la de muchas otras localidades en la República Centroafricana, donde años de violencia crónica han alimentado una crisis humanitaria muy olvidada por los medios.https://t.co/EJtI0Bks4I
— Médicos Sin Fronteras México (@MSF_Mexico) May 29, 2022
República Centroafricana sufre una situación muy compleja debido a la presencia de varios grupos guerrilleros, soldados extranjeros (ruandeses) y mercenarios rusos. “El conflicto entre Rusia y Ucrania y la presencia de fuerzas rusas trabajando junto a las ruandesas y las Fuerzas Armadas Centroafricanas (FACA) para la reconquista de toda la extensión del territorio nacional para la pacificación de la República Centroafricana, colocan hoy a nuestro país en una posición bastante delicada”, subrayan los obispos centroafricanos recordando que “la guerra significa destrucción humana y material, abuso, violación de los derechos humanos, destrucción de bienes, lugares de culto e instrumentalización de las creencias religiosas. Después de haberlo vivido, no se puede desear este horror a ningún pueblo”.
Al recoger las indicaciones surgidas durante el Sínodo celebrado en Bangui del 24 al 31 de octubre de 2021, los obispos llaman a "la Iglesia centroafricana a redescubrir el auténtico sentido de la misión”: “Siguiendo la misión de Cristo, la Iglesia no puede asimilarse a una Organización Humanitaria No Gubernamental (ONG). Invitamos a las Comunidades Eclesiales de Base (CEB), a los Movimientos y Fraternidades y a los distintos organismos diocesanos a repensar su forma de ser y de actuar. De este modo se convertirán en lugares más reales de comunión y compasión, de amor y de escucha de los pobres, de acompañamiento de las personas que viven en situaciones de sufrimiento y de reintegración de los marginados y las marginadas”.
“Invitamos a todos los bautizados a ser verdaderos artífices del Sínodo y a difundir sus frutos en sus ambientes. Caminar juntos, en efecto, es promover una cultura y una civilización de paz y amor que triunfe sobre el odio, los celos y el miedo al otro”, concluye el mensaje.
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