Tras la reapertura del caso y las revelaciones del diario El País Jesuitas de Bolivia admiten encubrimiento en el caso de supuestos abusos del sacerdote español Luis María Roma
El portavoz de la Compañía de Jesús en Bolivia, Sergio Montes, reconoció a EFE que la orden no siguió el protocolo de denuncia ni los procedimientos adecuados para hallar a las víctimas de los supuestos abusos del jesuita español Luis María Roma
La investigación previa canónica, (…) el modo que se llevó a cabo, fue en algún caso negligente, evidentemente indolente y probablemente no obraron según lo que correspondía”, dice
Hace unos días, el diario El País publicó más revelaciones de la investigación interna sobre el cura Roma en el reportaje ‘Los Manuscritos de Charagua’ y consideró que la orden “ocultó” esa información
Edwin Alvarado, representante de la Comunidad Boliviana de Sobrevivientes, dijo que el proceso judicial "va más allá de (Luis María) Roma" pues trata de "exhibir al mundo la responsabilidad institucional de la Compañía de Jesús" en este caso
Hace unos días, el diario El País publicó más revelaciones de la investigación interna sobre el cura Roma en el reportaje ‘Los Manuscritos de Charagua’ y consideró que la orden “ocultó” esa información
Edwin Alvarado, representante de la Comunidad Boliviana de Sobrevivientes, dijo que el proceso judicial "va más allá de (Luis María) Roma" pues trata de "exhibir al mundo la responsabilidad institucional de la Compañía de Jesús" en este caso
| RD/EFE
El portavoz de la Compañía de Jesús en Bolivia, Sergio Montes, reconoció a EFE que la orden no siguió el protocolo de denuncia ni los procedimientos adecuados para hallar a las víctimas de los supuestos abusos del jesuita español Luis María Roma, fallecido en 2019, cuyo caso fue nuevamente abierto por la Fiscalía boliviana.
“Según lo que se estableció en ese protocolo, los pasos no se habrían cumplido porque se instaló la investigación previa canónica (…) el modo que se llevó a cabo fue en algún caso negligente, evidentemente indolente y probablemente no obraron según lo que correspondía”, dijo Montes.
El protocolo ‘Ambientes Sanos y Seguros’, de febrero de 2019, establecía que “cuando se tiene conocimiento de un probable caso de abuso sexual” la Compañía de Jesús debe “formular la denuncia” ante la Fiscalía.
Asimismo, el religioso también reconoció que “probablemente” el modo que usó la orden para contactar a las víctimas “no fue el adecuado”.
En febrero 2019, EFE dio a conocer el caso de Roma por una denuncia de un exmiembro de la orden que pidió el anonimato y que basó las acusaciones en una treintena de fotografías en las que dijo reconocer al supuesto agresor de varios menores de edades entre 6 y 12 años.
A partir de esto, la orden inició una investigación interna contra el sacerdote, que tenía 84 años, ordenada por el entonces provincial Osvaldo Chirveches, quien designó una comisión formada por al menos un jesuita, un psicólogo y una abogada.
Roma falleció el 6 de agosto de 2019 sin conocer el resultado de la indagación. La orden declaró la “verosimilitud” de la denuncia públicamente a mediados de 2022.
El caso de Roma volvió a tomar importancia a partir de la investigación del medio español El País, en mayo de 2023, cuando reveló el diario personal del jesuita español Alfonso Pedrajas y sus presuntos abusos contra decenas de niños y adolescentes cuando dirigió un colegio desde 1971, lo cual dio lugar a otras denuncias.
Chirveches, siendo ya exprovincial, presentó la denuncia contra Roma cuatro años después de la apertura de la investigación interna, pero tras algunos meses la Fiscalía cerró el caso debido a la falta de declaraciones de las víctimas.
Hace unos días, el diario El País publicó más revelaciones de la investigación interna sobre el cura Roma en el reportaje ‘Los Manuscritos de Charagua’ y consideró que la orden “ocultó” esa información.
Reapertura del caso
Montes dijo que la institución supo hace “varios meses” que la investigación se había cerrado y que en ese momento la orden “no” presentó ningún recurso legal de objeción a esa decisión judicial.
Esto ha cambiado debido a que el reportaje del diario español recoge el testimonio de una víctima, por lo que la Compañía de Jesús pidió la reapertura del caso “para que se establezcan las responsabilidades”, dijo Montes.
El portavoz jesuita defendió el llamado que la orden hace a las víctimas para ofrecerles ayuda en “acciones de justicia”, aunque también admitió que la Compañía de Jesús tiene un “vínculo económico” con los religiosos acusados, a quienes asigna un monto para “solventar gastos” de su defensa judicial.
El representante de la Comunidad Boliviana de Sobrevivientes, Edwin Alvarado, dijo a EFE que es una “impostura” y una forma de “lavar responsabilidades cuando los jesuitas ofrecen ayuda legal a las víctimas y al mismo tiempo corren con los gastos legales de los denunciados”.
Una fuente ligada a la investigación penal, que pidió el anonimato, dijo a EFE que “se tendría que haber imputado” a Chirveches por “encubrimiento”, pero que el Ministerio Público rechazó el caso ante la conminatoria de una resolución por parte de la Fiscalía General y la falta de resultados.
La persona informante también cuestionó que Chirveches, que denunció el caso Roma el 9 de mayo de 2023, entregó “fotocopias” de las fotografías de los supuestos abusos y del diario de Roma y no los documentos originales.
Después de la denuncia de Chirveches se allanó la Curia Provincial en La Paz.
Por su parte, Alvarado dijo que el proceso judicial “va más allá de (Luis María) Roma” pues trata de “exhibir al mundo la responsabilidad institucional de la Compañía de Jesús” en este caso.
Aparte de Chirveches, la comunidad de sobrevivientes señaló laresponsabilidad del también exprovincial español Ignacio Suñoly de otros sacerdotes, algunos ya fallecidos, quienes participaron en la comisión de investigación del caso Roma y no denunciaron este hecho ante la Justicia.