| Agencias
Queridos Jóvenes de NCYC [National Catholic Youth Conference], les envío un saludo muy afectuoso y mis oraciones en este encuentro que están viviendo. Que sea una ocasión para fortalecer y hacer crecer la fe y la comunión. ¡Que encienda sus corazones misioneros con el coraje y la fuerza para vivir en y con el Señor, en una Iglesia en salida! Siempre.
Hoy, como en los inicios, necesitamos salir al encuentro de cada persona, más, es nuestra misión hacerlo, especialmente de las más alejadas y de las que sufren. ¡Debemos llegar a las periferias existenciales de nuestro mundo! Ustedes conocen a sus coetáneos, saben que muchos están solos, que muchos no conocen a Jesús. Vayan, vayan y lleven al Señor, vayan y llenen sus ambientes, incluso los digitales, no de convicciones, no para convencer, no para hacer proselitismo, sino para testimoniar la ternura y la misericordia de Jesús.
¡Los bendigo de corazón, y no se olviden de rezar por mí! Gracias.
"Vayan y llenen sus ambientes, incluso los digitales, no de convicciones, no para convencer, no para hacer proselitismo, sino para testimoniar la ternura"