Extraido de "Trama divina, hilvanes humanos" Ed. PPC Volver a la Palabra con la vida (III Domingo "De la Palabra")
El gesto del Papa Francisco de querer dedicar una fiesta dominical a la Palabra de Dios, tiene un valor de llamada a considerar con radicalidad lo que ha de ser la Escritura en la vida del creyente y en las comunidades, así como en la Iglesia entera. Una vez que en Cristo la Palabra se hizo carne, no hay otro modo de ser creyente cristiano que no pase por la palabra vivida, interpretada y acogida en el propio existir personal y comunitario.
| José Moreno Losada
Lc 1, 1-4. 14-21
Puesto que muchos han emprendido la tarea de componer un relato de los hechos que se han cumplido entre nosotros, como nos los transmitieron los que fueron desde el principio testigos oculares y servidores de la palabra, también yo he resuelto escribírtelos por su orden, querido Teófilo, después de investigarlo todo diligentemente desde el principio, para que conozcas la solidez de las enseñanzas que has recibido.
Jesús volvió a Galilea con la fuerza del Espíritu; y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas, y todos lo alababan.
Fue a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el rollo del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado a evangelizar a los pobres, a proclamar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista; a poner en libertad a los oprimidos; a proclamar el año de gracia del Señor». Y, enrollando el rollo y devolviéndolo al que lo ayudaba, se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos clavados en él. Y él comenzó a decirles: «Hoy se ha cumplido esta Escritura que acabáis de oír».
Hoy se ha cumplido esta Escritura
Tras la sencilla vida oculta es la convicción mayor a la que ha llegado Jesús de Nazaret, la Palabra de Dios siempre se cumple. La ve cumplida en toda la creación, sintiéndose criatura en medio de todas las criaturas y ha entendido el lenguaje de lo trascendente en lo terreno, lo histórico, la vida. Sembrar, recoger, pescar, cuidar el rebaño, partir el pan, hacer un camino, conversar, descansar, sanar, enfermar, nacer, morir…no hay verbo en el que no transite Dios de alguna manera. El Reino está dentro de nosotros y en el quehacer de cada día se produce la acción liberadora de Dios para su pueblo y para toda la creación. Llegar a entrar en ese misterio de la vida es vivir en la clave del don de lo diario y de la construcción de una fraternidad que salva y libera. Ojalá tengamos la convicción interna de hoy se está cumpliendo lo que Dios dice a favor nuestro.
El nuevo arzobispo y la Escritura
Hace casi un año que llegó José Rodríguez Carvallo como arzobispo coadjutor a nuestra diócesis de Mérida-Badajoz. Literalmente ha estado durante todo este tiempo pateando parroquias y espacios eclesiales y sociales muy variados, desde Cabeza del Buey hasta presencias en la cárcel o en el centro hermano. Muy atento y sirviendo, en la espera de sustituir a don Celso, cosa que acaba de suceder. En estos días tuve una conversación ocasional con él por motivos pastorales, y en el diálogo me mostraba cómo no echaba de menos la realidad de Roma en la que había estado el último decenio. Pidió al Papa poder estar en una realidad pastoral concreta de pastoreo en diócesis y ahora lo estaba viviendo con gozo y con deseos de actuar en vivo y en directo como un pastor con su rebaño, en el ideal del seguimiento de Jesús. También me hablaba de lo importante que es para él la Palabra de Dios –su formación académica fue en Sagrada Escritura- , como centro de su ministerio y yo lo confirmo con sus intervenciones, tanto las de llegada como en las que estos días ha tenido al dar el paso a la oficialidad de arzobispo de Mérida-Badajoz.
Hoy al ver cómo Lucas defiende su trabajo de exposición del evangelio profundizado y contrastado, y presentara a Jesús como testigo de que la Palabra de Dios se cumple, he recordado la homilía de este pastor en la celebración de su paso a la responsabilidad última de esta diócesis y extraigo algunas de ellas para compartirla. Me alegra que sea tan explícito en su apoyo en la palabra para leer el momento presente que vivimos y la tarea que nos queda por delante:
“La situación real del mundo y de la Iglesia pasa por la dificultad, quizá como siempre, pero a nosotros nos toca vivirlo hoy y es aquí donde hemos de convertirnos para ser y testimoniar el evangelio de Jesús de Nazaret.
En la celebración solemne de la catedral quiso escoger el texto lucano de la pesca milagrosa (CFR. Lc 5,1-11) como clave de su inicio en el servicio episcopal diocesano. Entiende fray José que el texto da claves iluminadoras para lo que va a ser su quehacer y el de todos los agentes de pastoral que trabajan en esta iglesia en esta nueva etapa. El marco general de sus intervenciones era una invitación a la conversión para vivir en la fe, entendida esta como obediencia y docilidad al Evangelio en la dificultad, incluso ante lo aparentemente imposible. Es el tiempo de la fe nos decía.
Entre líneas y a la luz de la palabra evangélica podemos señalar lo que entiende este pastor que son dificultades actuales con las que hemos de contar tanto en la sociedad como en el seno de la Iglesia. La primera dificultad está en la dinámica cultural que organiza y dirige la vida de nuestras sociedades que no está centrada en valores trascendentes, que no tiene a la persona y la dignidad de la vida humana como centro, aunque también esté llena de riquezas y posibilidades. Este terreno se muestra pedregoso y la mar en tempestad para bregar y pescar en nombre del evangelio. La hora es difícil y los peligros para la Iglesia son claros y actuales:
- - Hemos de ponernos en guardia contra la tentación de sucumbir al desánimo y al desaliento.
- - Seamos conscientes de que una Iglesia que no atrae es porque está dormida, que no vive desde el evangelio ni quiere renunciar a ritos ni a costumbres, que perdió el primer impulso, la frescura de los orígenes.
- - No nos dejemos asfixiar por la realidad de que somos pocos, tal vez ancianos, y con achaques; de la realidad de desierto con la que nos encontramos en torno nuestro y con la convicción de que estamos solos y de que nuestra palabra cae en terreno pedregoso, entre abrojos o a la vera del camino (cf. Lc 8, 4ss).
Avisa el pastor que, aunque la situación sea dura, aunque todo esto puede que en parte sea verdad, como verdad es que los tiempos en que vivimos no son los más propicios para la pesca, nosotros hemos de leer creyentemente el momento para responder desde la fe.
Entiende el arzobispo que ante la realidad que vivimos, ahora es el tiempo de la fe, cuando Jesús como a Pedro y a sus compañeros, nos invita a ser pescadores de hombres, a vivir testimoniando el evangelio con la vida y si es necesario con el dolor y la entrega sacrificada. Remar mar adentro y echar las redes ha de ser la actitud propia del Pastor, así como de todo el pueblo de Dios. Hemos de hacerlo obedeciendo a su Palabra, sabiendo que este es el único motivo para esperar lo imposible que se nos ha prometido.”
Volver a la palabra con la vida
Volver sobre la Palabra es desvestirnos de todo aquello que ha ocultado lo más originario de la Escritura y nos ha embrollado en consideraciones que, cuando menos, nos alejado de la vida propia y del sentir profundo de lo humano y de lo histórico.
Toca recuperarnos en torno a la Escritura, en la persona de Cristo, pequeñas comunidades que aprenden a leer la Palabra de Dios en las claves de lo humano, y todo lo que va aconteciendo interpretado en el sentir bíblico de una historia de la salvación y en el centro único, roca fundamental, que es Cristo y su Evangelio de salvación.
Nos toca profundizar en esa invitación tan profunda del concilio vaticano II en torno a la Palabra y al ser de la Iglesia en medio del mundo, como cumplimiento actual de ese mensaje. Se trata de la conexión definitiva entre palabra y vida. Ojalá lleguemos a esa convicción profunda de Jesús: “hoy se está cumpliendo la palabra que acabáis de oír”.En torno a la Palabra
Notas hilvanadas: Baila y déjate de historias
"Simplemente baila y déjate de historias aunque no tengas el control, simplemente baila, pase lo que pase pon en sus manos tu corazón" (Hakuna Group Music)