La mayoría de los países europeos prohíben, de manera más restrictiva que en España, el culto público Iglesias cerradas, misas sin fieles, desescalada... ¿Qué ocurre en Europa?
España no es, ni de lejos, el país de la UE con mayores restricciones al culto
En Alemania o República Checa podrían comenzar a permitirse celebraciones con menos de 15 fieles en cada templo, mientras que en Suiza o Austria las iglesias están cerradas. En Dinamarca se permiten bautizos, bodas y funerales con restricciones
En Polonia, sólo pueden ir a misa un máximo de cinco fieles, y las autoridades pueden disolver la celebración como "asamblea no autorizada"
En Polonia, sólo pueden ir a misa un máximo de cinco fieles, y las autoridades pueden disolver la celebración como "asamblea no autorizada"
Misas a puerta cerrada, sin fieles, con pequeñas (y lamentables) excepciones... El drama del coronavirus afecta a toda Europa, y también a las iglesias, que no pueden celebrar Eucaristías abiertas al público masivo. Aunque nuestro país no es, ni mucho menos, el más restrictivo, lo cierto es que el Real Decreto aprobado el pasado 14 de marzo no impide las misas -con las naturales precauciones de seguridad y salubridad, y con un número reducido de fieles-, pero sí dificulta, y mucho, que un fiel pueda dirigirse al templo para participar en las mismas.
La postura de la práctica totalidad de los obispos españoles -salvo Reig Plá-, llamando a los sacerdotes a celebrar misas sin público, y a los fieles a seguirla a través de los medios de comunicación o redes sociales, no impide que desde la CEE ya se hable de una posible 'desescalada', que permita volver a celebrar el culto en la tan cacareada 'nueva normalidad'.
¿Qué sucede en el resto de Europa? En casi todos los países, las misas públicas están prohibidas, en muchos casos con dictámenes mucho más restrictivos que en nuestro país. Italia tiene unas medidas prácticamente idénticas a las nuestras, sin apenas problemas de cumplimiento ni de quejas de los católicos del país transalpino.
Alemania, Francia... los grandes países europeos han seguido las recomendaciones del Vaticano, que sigue -a su pesar- el mismísimo Papa Francisco. Aunque todos sueñan con un progresivo regreso a los sacramentos.
Alemania, Francia, Polonia...
* En Alemania, por ejemplo, algunos estados federales han anunciado que los servicios religiosos se reanudarán a comienzos de mayo, aunque con un pequeño número de participantes. El estado de Sajonia, por ejemplo, ya permite celebraciones con hasta 15 personas.
* En Francia, los cultos públicos también están prohibidos indefinidamente. Las medidas se mantendrán en vigor, al menos, hasta el 11 de mayo. Sólo entonces se podría facilitar la desescalada, que también afectaría a los templos.
* En Polonia, el país “más católico” del este de Europa, sólo se permiten servicios con un máximo de cinco fieles en cada templo. De lo contrario, las autoridades pueden disolver la celebración como “asamblea no autorizada”. Algo que puede cambiar en las próximas semanas si, como parece, comienza la desescalada Polonia.
* En la República Checa, las misas abiertas están prohibidas. La solución, como en nuestro país, son las transmisiones on line. Una situación que podría cambiar a partir del lunes próximo, cuando el Gobierno pueda permitir un máximo de 15 personas por templo, que mantengan una mínima distancia entre sí.
Misas prohibidas
* En Dinamarca, las iglesias también están cerradas, aunque el gobierno podía permitirlas a partir del 10 de mayo. Por el momento, bautizos, bodas y funerales pueden celebrarse, pero con un número limitado de diez personas.
* En Austria, a partir del 15 de mayo los servicios de culto público podrían volver a ser posibles, aunque deberán observarse amplias medidas de seguridad, desde la distancia entre los fieles al uso de mascarillas y geles de manos. En cambio, en Suiza no habrá culto público, al menos, hasta el 8 de junio.
* En Luxemburgo, las misas también están prohibidas hasta, al menos, el 10 de mayo, y su reanudación solo tendrá lugar si se da un desarrollo positivo de la pandemia, tal y como asumió el Arzobispado de Luxemburgo.
* En Bélgica, no habrá culto público hasta el 3 de mayo, aunque sí se permite la participación de un máximo de 15 personas en los funerales. En las bodas podrán asistir el novio, la novia, los testigos y el clérigo responsable del oficio.
Finalmente, en Holanda no habrá misas en público hasta Pentecostés, por una decisión de la Conferencia de Obispos, basándose en la prohibición general de asamblea concretada por el gobierno hasta el 1 de junio.
*con información de Katholisch.de
