Según una encuesta encargada por la Conferencia Episcopal Los argentinos diagnostican que la Iglesia tiene "una visión dogmática", tradicional y autorreferencial
La mayoría de argentinos cree que la Iglesia no experimentó cambios, o que estos fueron insuficientes ante las transformaciones que está teniendo el mundo
Quieren que la institución sea más abierta, cercana y comprensiva, pero no están familiarizados con su labor ni acuden con frecuencia al templo, recoge el sondeo
La Conferencia Episcopal solicitó la encuesta para contar con información en base a la que definir los mecanismos y formas de comunicación más adecuados para aumentar las donaciones recibidas
La Conferencia Episcopal solicitó la encuesta para contar con información en base a la que definir los mecanismos y formas de comunicación más adecuados para aumentar las donaciones recibidas
| Sergio Rubin
(Valores religiosos).- Casi siete de cada diez argentinos se declaran católicos (67 %) y la mayoría de ellos considera que la principal misión de la Iglesia es evangelizar, educar y guiar, brindar contención espiritual y emocional, y ayuda material. Además de que igual proporción de argentinos cree que el sentido básico de la religión es darle un significado a la vida en este mundo, según una encuesta encargada por la Conferencia Episcopal, que fue presentada días pasados. Hasta aquí podría decirse que los resultados del sondeo trazan un contexto positivo para el accionar de la Iglesia en el país. Pero la gran cantidad de fieles que están poco familiarizados con su tarea, la extendida insatisfacción con el modo en que desarrolla su labor espiritual y la escasa asistencia al culto que también revela patentizan la magnitud del desafío que enfrenta hoy la institución.
Veamos. Seis de cada diez argentinos (61 %) declaran estar poco o nada familiarizados con la tarea que realiza la Iglesia en el país. Entre los católicos, el 58 % dijo estar poco familiarizado. Por otra parte, la mayoría cree que no experimentó cambios o que estos fueron insuficientes ante las transformaciones que está teniendo el mundo. Le achaca una visión dogmática, escasa salida, misas tradicionales. Además del impacto de las denuncias de abusos sexuales cometidos por miembros del clero. En general, demandan una Iglesia “más abierta, inclusiva y tolerante”, “más moderna y proactiva”, “más comunicativa, informativa y participativa” y “más coherente con sus prédicas”. Asimismo, solamente el 16 % de los católicos dice asistir semanalmente al servicio religioso; el 13 %, una vez al mes; el 49 %, menos aún, y el 22 %, nunca.
Demandan una Iglesia más "inclusiva", "proactiva" y "coherente con sus prédicas"
La encuesta -que tuvo alcance nacional y un nivel de error de +2,6 %- fue realizada por la consultora VOICES! entre septiembre y octubre, y abarcó 2.790 casos mediante la modalidad online con reclutamiento a través de la redes. Fue pedida específicamente por la comisión para el Sostenimiento de la Acción Evangelizadora de la Iglesia con el fin de contar con información en base a la cual definir los mecanismos y formas de comunicación más adecuados para aumentar las donaciones con vistas al financiamiento de la institución y así reemplazar el aporte estatal y, en general, mejorar su presupuesto. En 2018, la Conferencia Episcopal anunció la renuncia gradual a la ayuda del fisco, que ronda el diez por ciento de sus recursos (en 2019 fueron unos 150 millones) con el objetivo de que sean los propios fieles los que la solventen.
El sondeo fue presentado por el presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Óscar Ojea; el titular de la mencionada comisión episcopal, monseñor Guillermo Caride, y la directora de VOICES!, Constanza Cilley. Si bien reveló que la Iglesia tiene una imagen positiva en el 48 % en la población, un 44 % la evalúa negativamente, lo que confirma una baja en la valoración, en línea con otras instituciones. Es percibida en dos dimensiones: como parroquia, donde el vínculo tiende a ser más cercano y es apreciada como lugar de encuentro con Dios y de contención emocional. Y como institución, siendo la relación más lejana y la postura de la gente de respeto o cierto rechazo. Cáritas, con el 74 % de aprobación, tiene una buena imagen, seguida por los colegios y universidades católicas, con el 63 %.
Un dato especialmente inquietante es que casi cinco de cada diez argentinos piensan que el principal beneficiario del trabajo de la Iglesia es el clero (obispos, sacerdotes, monjas). Y solo el 21 % considera que es la población a la que ayudan, mientras que el 17 %, que es la población en general, y el 5 %, que es el Estado. En el terreno ya más específico del sostenimiento, el sondeo revela que no la tendrá fácil para aumentar las donaciones. El 35 % de los argentinos cree que la Iglesia no necesita dinero, entre ellos el 32 % de los católicos. Un porcentaje mayor, el 44 %, piensa que el Estado es su principal sostén; un 27 %, los fieles, y un 12 %, El Vaticano. Llamativamente, el 59 % considera que debe ser la Santa Sede la que la financia, en tanto que el 42 % le atribuye esa responsabilidad a los fieles, y el 17 % al Estado.
Para la mayoría de los argentinos (75 %) la realización de obras de caridad es el destino más importante a la hora de donar dinero a la Iglesia, mientras que para la mitad (49 %), el mantenimiento de las iglesias y las obras de infraestructura. Pero para la otra mitad (51 % y el 53 %) es entre poco y nada importante aportar para estos dos últimos fines. Cerca de cuatro de cada diez católicos (36 %) declara contribuir con regularidad a la Iglesia. Y entre quienes dicen que donarían, lo harían en promedio cada dos meses. Pero en el Episcopado no tienen claro que estos dos últimos resultados se verifiquen en la realidad. Llegados a este punto, casi cuatro de cada diez (38 %) declararon que le donarían dinero a la Iglesia para su mantenimiento. Lo que significa una numerosa cantidad de potenciales aportantes: 8.390.000.
El 35 % de los argentinos cree que la Iglesia no necesita dinero, entre ellos el 32 % de los católicos. Un porcentaje mayor, el 44 %, piensa que el Estado es su principal sostén; un 27 %, los fieles, y un 12 %, El Vaticano
De acuerdo con la encuesta, los católicos tienen en claro que la función de la Iglesia es “predicar y evangelizar” (lo que implica una mayor salida y apertura al exterior y captación de fieles); “educar y guiar” (lo que exige adaptarse a los cambios sociales y valores de la época); “brindar contención espiritual y emocional” (lo que le demanda ser más abierta e inclusiva, contenedora y participativa), y “dar ayuda material” (lo que conlleva una mayor comunicación y transparencia). Al respecto, VOICES! señala que “las funciones (que los fieles le atribuyen a la Iglesia) son correctas, pero a la vez se tiende a reclamar cambios –sea porque faltan, sea porque son insuficientes- en la forma de implementarlas”.
Pero los fieles también observan cambios positivos. Entre ellos, aparece “el Papa Francisco, la labor de la parroquia y el sacerdote en particular, así como una mayor aceptación del divorcio y de la diversidad sexual”. En síntesis, concluye la encuestadora, los desafíos que enfrenta la Iglesia hoy pasan por: “actualizarse” (adaptarse a los cambios sociales y culturales y el estilo de las misas); “mejorar su imagen” (recuperar la confianza y la credibilidad); “acercarse” (acercarse más a los fieles), y “contener” (mayor contención de los sectores vulnerables). Dicho sea de paso, el sondeo muestra una mayoritaria propensión de los fieles al uso de internet y la TV con fines religiosos, lo que implica un universo a ser más aprovechado por la Iglesia.
El sondeo muestra una mayoritaria propensión de los fieles al uso de internet y la TV con fines religiosos, lo que implica un universo a ser más aprovechado por la Iglesia
En definitiva, siguen siendo muchos los argentinos que se declaran católicos -pese a los enormes cambios culturales y las dificultades que afronta la Iglesia-, si bien el porcentaje cayó desde el último censo que preguntó sobre la filiación, el de 1960, que arrojó un 90 %. Pero la asistencia al culto es muy baja, en línea -en rigor- con otros países de características similares. Además, aunque la encuesta no lo indagó, es claro que existe una enorme brecha entre ciertos postulados católicos (sobre todo en materia sexual) y su observancia por parte de los fieles (una encuesta del CONICET y otra de la UCA fueron relevadoras de esto). Y, finalmente, es evidente la demanda de un aggiornamento de la institución.
Los fieles, pues, dejaron en claro que el desafío para la Iglesia en el país va mucho más allá de aumentar las donaciones para autofinanciarse y así prescindir del aporte del Estado. Que pasa por recrear -no de mutilar- un mensaje de 2.000 años, y hacerlo muy cerca de la gente, con sus angustias y alegrías, siempre en actitud contenedora para que llegue mejor al corazón del Pueblo de Dios. Como quiere Francisco.