Reflexiones en torno al asesinato de cristianos por el mero hecho de ser cristianos
1) El radicalismo islámico, que lleva años actuando, se ha radicalizado. Es una tragedia que están viviendo los cristianos, víctimas del fanatismo religioso, en muchos países.
2) El mundo mira para otro lado. Estas noticias apenas son noticia. Un ejemplo: el impacto que tuvo en los medios de comunicación el caso Charlie-Hebdo fue infinitamente mayor al del caso de los coptos egipcios.
3) “Estado Islámico”, es como los terroristas gustan llamarse. Pero ¿es que acaso son un Estado? No les hagamos el juego. Son terroristas que manejando el marketing del terror consiguen adeptos.
4) Las condenas de los líderes políticos son tibias y mucho más centradas en palabras que en hechos.
5) Reconozcamos que hace unos 8 siglos la iglesia católica también montó cruzadas absurdas y mató miles de musulmanes. Pero extrayendo conclusiones de lo que vino después.
6) Las condenas de los líderes religiosos musulmanes son casi inexistentes. Si no condenan cabe deducir que lo están aceptando tácitamente.
PROPUESTAS
a) Asumamos el compromiso de informar y sensibilizar sobre la situación de los cristianos que están siendo perseguidos por su fe. De practicar la oración y la caridad con ellos.
b) Seamos conscientes de que si el asunto nos preocupa y ocupa como ciudadanoslos políticos se acabarán mojando e implicando.
c) Hagamos saber que, desde la triste realidad de las cruzadas, aprendimos la importancia de conjugar “razón y fe”. Y rechacemos, por ello, los fundamentalismos que afirman una fe sin razón o contra la razón.
d) Comprendamos que es imprescindible que los musulmanes “de bien” condenen, se mojen y se movilicen. Y armémonos de valor, de esperanza y de convicción para dialogar con ellos.