El purpurado regresó a la diócesis tras su encuentro con el Papa Francisco Cañizares, ovacionado en la Catedral de Valencia “por su valiente defensa de la familia cristiana en tiempos de persecución"
(Avan).- El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, fue ovacionado anoche a su entrada en la Catedral de Valencia por los centenares de familias valencianas que han llenado el templo en el Jubileo de las Familias convocado por el purpurado.
El cardenal ha acudido a la puerta santa de la Seo donde ha recibido a las familias que peregrinaban desde la iglesia de San Lorenzo para ganar el jubileo y que, nada más ver al arzobispo, han prorrumpido en un aplauso.
Posteriormente, el presidente de la comisión diocesana de Familia y Vida, Juan Andrés Taléns, en el saludo inicial de la celebración, ha agradecido al cardenal Cañizares "en nombre de todas las familias presentes su valiente defensa de la familia cristiana en estos tiempos también de persecución", a lo que los fieles han respondido también con otra ovación dedicada al purpurado.
También, al acabar la misa, y después de haber sido felicitado por una familia numerosa, de 11 hijos, cuyos padres le han pedido que "no se deje arredrar y siga defendiendo la familia", el cardenal Cañizares tras impartir la bendición, ha finalizado la eucaristía agradeciendo y felicitando a las familias cristianas por su testimonio. "El mundo necesita esto para renovarse, sólo podrá renovarse fortaleciendo la familia como transmisora de la fe", ha señalado el prelado para concluir "¡ánimo y adelante, que no podrán, aunque quieran, derribar a la familia!"
En su homilía, el cardenal ha invitado a las instituciones a "apoyar decididamente a la familia" porque en ella "se juega el futuro del hombre y de la sociedad", y a no ofrecer a las familias sólo "soluciones superficiales e ingenuas". Según ha señalado "no ayudar a la familia es una actitud irresponsable y suicida" y ha remarcado que "el mundo sólo se puede renovar fortaleciendo la familia".
La familia "se ha convertido en blanco de contradicción, por una parte es la institución más valorada por la sociedad, y por los jóvenes, y al mismo tiempo, es sacudida en sus mismos cimientos y sufre ataques de gran calado que a nadie se le ocultan", ha señalado el purpurado en su homilia.
Ante esta situación, ha urgido a "defender la familia basada en el matrimonio único e indisoluble", que nos abre a la "esperanza auténtica para la humanidad, tal y como expresa el papa Francisco, en continuidad total con los anteriores papas, en su exhortación apostólica `Amoris laetitia´".