"Como alcalde y como ciudadano de Conil, siento que debo y necesito estar al lado de Rafael" El alcalde de Conil defiende al párroco relegado por monseñor Zornoza: "Rafael representa la Iglesia del pueblo, no frente al pueblo"
"El pueblo de Conil espera una explicación ante esta inesperada (o no) decisión" del señor obispo
"Rafael se caracteriza por decir la verdad de frente y hacerlo siempre con firmeza, pero con gran respeto. Estés de acuerdo o no con sus palabras en cada momento, siempre aporta desde esa sinceridad un elemento más de reflexión"
Durante todo su tiempo pasado, y espero realmente que futuro, en Conil, Rafael se ha mostrado al lado de pueblo. Muy especialmente en los momentos más duros que acabamos de vivir y que aun seguimos viviendo
Durante todo su tiempo pasado, y espero realmente que futuro, en Conil, Rafael se ha mostrado al lado de pueblo. Muy especialmente en los momentos más duros que acabamos de vivir y que aun seguimos viviendo
Rafael Zornoza lleva años rigiendo la diócesis de Cádiz como su particular cortijo, con la inestimable ayuda de su ecónomo y alter ego Antonio Diufaín. Entre los dos dirigen una especie de Diócesis SA, con criterios puramente mercantiles, lo que les llevó a despedir a muchos trabajadores del obispado sin miramiento alguno. Algunos curas llevan tiempo protestando por esta deriva, pero sólo uno de ellos, el canónigo Rafael Vez, se ha atrevido a criticar públicamente la conducta del tándem diocesano, pidiendo especialmente la salida del ecónomo.
Monseñor Zornoza, que durante años se resistió a prescindir de los servicios de su ecónomo, acaba de apartar de su cargo a Antonio Diufaín. Como los presidentes de los clubes de fútbol, para salvar su cabeza entrega la de su 'servidor'. Pero, quizás para compensar, el obispo de Cádiz continúa dando otra vuelta de tuerca a la marginación a la que ha sometido, desde hace años, al canónigo Vez. Primero le apartó de su 'oficio' en la atedral y, ahora, le rebaja de párroco a administrador de Conil, su parroquia desde hace años.
Una 'venganza' episcopal que la gente no entiende ni comparte. Por eso, en el nombre del pueblo al que representa y en el suyo propio, el alcalde de la localidad, Juan Manuel Bermúdez, publica este comunicado en apoyo del sacerdote.
Texto íntegro del comunicado del alcalde de Conil
Estimados vecinos y vecinas:
Hace unos dias nos llevamos una desagradable sorpresa al conocer por determinadas redes sociales la noticia que afecta al nombramiento de Rafael como Administrador Parroquial, dejando en una situación de inseguridad su desempeño como párroco de Conil. Y más aún cuando conocimos que dicha situación tampoco había sido anunciada y justificada de la manera adecuada al propio afectado. Y por supuesto ni a sus feligreses ni al propio pueblo de Conil, que espera una explicación ante esta inesperada (o no) decisión.
Es conocida mi posición como no creyente, y por ello, no entraré a valorar estructuras ni razones. Pero sí quiero mostrar todo mi apoyo a la persona que conozco detrás del hábito, y a su labor al frente de la parroquia, y no solo de la parroquia.
Todos sabemos que Rafael es una de esas personas de las que decimos que no tienen “pelos en la lengua”. Y tal vez esto, que debería ser defendido en las Instituciones, sea precisamente la causa más evidente de su situación actual.
Rafael se caracteriza por decir la verdad de frente y hacerlo siempre con firmeza, pero con gran respeto. Estés de acuerdo o no con sus palabras en cada momento, siempre aporta desde esa sinceridad un elemento más de reflexión.
Representa una iglesia que se caracteriza por estar en el frente de la ayuda a los que más necesitan de ella, comprometida socialmente como se demuestra en su participación en los círculos del silencio. Una iglesia que en situaciones tan duras como las que hemos vivido estos meses jamás se ha puesto de lado. Rafael defiende desde esa sinceridad tan directa la solidaridad entre iguales, frente a la caridad entre diferentes. Ha movilizado, ha pedido ayuda, se ha remangado y ha trabajado por el bienestar de las personas que más necesitaban esta ayuda. La colaboración de la parroquia de Conil en la mesa de emergencia no deja lugar a dudas de su implicación humana, ya que no soy quién para valorar la religiosa.
Como alcalde he podido contar con él, y como ciudadano le estoy muy agradecido. Rafael se ha preocupado por la dignificación del trabajo (puede que una de las causas de la actual situación), se ha preocupado por la formación de colectivos vulnerables para que ello les permita acceder a un puesto de trabajo, prueba ello de su concepto de desarrollo humano que no se cansa de instigar desde su labor.
Representa sin duda la iglesia del pueblo, no frente al pueblo. La sensibilidad de la gente, frente a la estructura y rigidez de la Institución
Creo en las personas, en las buenas personas. Y cuando estas personas tienen un puesto de responsabilidad como es el que ejerce Rafael, y desarrolla su labor de la forma que lo hace, obtiene el reconocimiento no solo de feligreses sino de personas como yo que no se acercan al representante evangélico sino a quien muestra su disposición a la justicia y al trabajo con el pueblo al que la Institución debe servir.
Durante todo su tiempo pasado, y espero realmente que futuro, en Conil, Rafael se ha mostrado al lado de pueblo. Muy especialmente en los momentos más duros que acabamos de vivir y que aun seguimos viviendo. Rafael ha estado ahí en cada momento, presto a colaborar. Ahora yo, como alcalde, como ciudadano de Conil, siento que debo, es más, siento que necesito, estar al lado de Rafael. Y lo dice el alcalde, pero sobre todo la persona que ha trabajado codo a codo con él. Estando de acuerdo a veces, otras no… pero siempre con nuestra visión en común de trabajar para y por Conil.
Juan Manuel Bermúdez