"No hay narcisismo", asegura el pintor ante las críticas de los lugareños Polémico retablo en una iglesia de Guadix: el cura, el pintor y dos vecinos encarnan a los santos
El pintor malagueño José Antonio Jiménez, que ya fue muy criticado por el cartel de la Semana Santa de Málaga en 2019, vuelve a despertar las censuras con la pintura que cierra el conjunto del calvario de la Iglesia de San Miguel
"Defiendo una visión más contemporánea de este arte, están los santos con sus atributos, aunque con nuestros rostros", ha explicado el artista, recordando que se trata de una práctica que han utilizado muchos creadores a lo largo de la historia
"No hay narcisismo. Recurro a modelos actuales para que la gente vea que lo de la santidad no está tan lejos, todos estamos llamados a ser santos", ha matizado
"No hay narcisismo. Recurro a modelos actuales para que la gente vea que lo de la santidad no está tan lejos, todos estamos llamados a ser santos", ha matizado
| RD/EFE
El sacerdote de Guadix Antonio Fajardo, el pintor malagueño José Antonio Jiménez y dos vecinos de esa localidad granadina han servido de modelos para las cuatro pinturas que desde ahora decoran el altar de la iglesia de San Miguel, donde encarnan a San Fandila, San Pedro, San Torcuato y San Pablo.
Estas obras de óleo sobre lienzo, que han generado debate en este municipio del norte de la provincia de Granada, están situadas en el presbiterio de la parroquia y cierran el conjunto con el calvario que el artista ya pintó en 2014, según ha explicado este jueves a Efe Jiménez.
Este pintor de Benalmádena, autor del cartel de la Semana Santa de Málaga en 2019 que también generó polémica al combinar la imagen de una virgen con un grafiti, ha querido reivindicar con su obra el uso de modelos contemporáneos en imágenes sacras.
Para decorar el altar de la iglesia granadina el artista propuso al párroco que encarnara a uno de los santos, mientras que para los tres restantes recurrió a dos vecinos del pueblo y a él mismo.
"Defiendo una visión más contemporánea de este arte, están los santos con sus atributos, aunque con nuestros rostros", ha explicado el artista, que ha recordado que muchos creadores a lo largo de la historia ya se retrataron en sus propias obras y también recurrieron a modelos de su época.
"No hay narcisismo. Recurro a modelos actuales para que la gente vea que lo de la santidad no está tan lejos, todos estamos llamados a ser santos", ha indicado Jiménez, quien ha dedicado unos dos años a la elaboración completa de este proyecto.
Según avanza el diario Ideal, los cambios de paradigma estético en la parroquia no han sido entendidos por todos y algunos vecinos hablan directamente de que el cura se ha retratado junto a sus amiguetes en un gesto narcisista.