Los devastadores recortes a las agencias de desarrollo impuestos por la Administración Trump Redes de Apoyo: La Solidaridad Jesuita en tiempos de adversidad
![Un miembro del Servicio Jesuita a Refugiados](/2025/02/11/instinto_de_vida-_ansias_de_libertad/miembro-Servicio-Jesuita-Refugiados_2751634835_17559784_660x371.png)
El 24 de enero de 2025, un decreto emitido por la administración estadounidense suspendió de forma inmediata los fondos destinados a la asistencia exterior, provocando un terremoto en las bases de los proyectos humanitarios y educativos que miles de personas vulnerables en distintas partes del mundo tanto necesitan
Este recorte es el reflejo de una polarización global que, como una sombra alargada, afecta a muchos países. Los afectados comparten ahora un destino común, marcado por la incertidumbre y la interrupción de proyectos esenciales
Escucho con profunda tristeza las palabras de Alberto Ares, director de Servicio Jesuita a Refugiados (SJR) en Europa, en Televisión Española. Él denuncia los devastadores recortes a las agencias de desarrollo impuestos por la Administración Trump, y cómo estos impactan a los más pobres y vulnerables. Me conmueve aún más la lucha persistente que lidera Emergencia SJ, cuya reciente declaración resalta cómo los recortes ponen en riesgo los esfuerzos humanitarios en todo el mundo.
El 24 de enero de 2025, un decreto emitido por la administración estadounidense suspendió de forma inmediata los fondos destinados a la asistencia exterior, provocando un terremoto en las bases de los proyectos humanitarios y educativos que miles de personas vulnerables en distintas partes del mundo tanto necesitan. Entre los afectados, las organizaciones hermanas de la Compañía de Jesús —el Servicio Jesuita a Refugiados y Fe y Alegría— sufren los embates de una decisión que parece despojar a muchos de la esperanza que en su peregrinaje en este año jubilar parece que se detiene. Y no por querencia propia, sino ajena, sobre todo de los que manejan la polarización política y que la promueven hablando de muros, políticos o sociales, etc.
Este recorte es el reflejo de una polarización global que, como una sombra alargada, afecta a muchos países. Los afectados comparten ahora un destino común, marcado por la incertidumbre y la interrupción de proyectos esenciales. La suspensión de los fondos detiene de manera abrupta la labor de estas redes de apoyo, arrastrando consigo el tejido mismo de las vidas que tocaban con su esfuerzo. Las personas más vulnerables, aquellas que son invisibles (¿innecesarias?) para muchos, ven sus posibilidades de sobrevivir y prosperar gravemente amenazadas.
La llamada a la acción
En cada recorte, se fractura un destino, en cada cifra, se apaga un suspiro, y el eco de la injusticia resuena en las calles, donde la pobreza se convierte en sombra y olvido. Cada vez en más partes del mundo.
![Migrantes expulsados de EE.UU. hacia México](/2025/01/29/america/Migrantes-expulsados-EEUU-Mexico_2747735217_17537367_667x375.jpg)
En medio de este dolor y desconcierto, las palabras de Jesús resuenan con una fuerza renovada. Su llamada a servir a los más necesitados se convierte en un faro que guía la acción de quienes buscan hacer de este mundo un reflejo de la bondad divina, del Dios humanizado que se encarna continuamente haciendo propio el dolor ajeno . En tiempos de crisis, los principios de justicia y solidaridad no pueden ser meras consignas vacías, sino principios vivos que exigen una respuesta activa, audaz y compasiva. La responsabilidad de la comunidad internacional, como custodios de la dignidad humana, se vuelve más urgente ante la posibilidad de recortes adicionales.
¿Es aquí donde la esperanza debe constatarse?
No obstante, incluso en medio de la tormenta, la fe nos recuerda que no estamos solos. Jesús nos promete que aquellos que dan con generosidad serán recompensados. Es así como las redes de apoyo de las ONG jesuitas activan sus mecanismos de solidaridad y movilizan fondos para amortiguar el golpe a las comunidades más vulnerables. La Red Xavier, junto al Sector Social de los jesuitas en España, se levanta en defensa de los derechos fundamentales y en solidaridad con aquellos que han visto su trabajo interrumpido de forma abrupta. Este gesto no es solo un recurso material, sino un testimonio de esperanza, un recordatorio de la necesidad de caminar junto a los excluidos, los olvidados y los marginados .
La llamada a la esperanza
¿Dónde queda la esperanza cuando se corta el pan?
El papa Francisco nos llama a ser signos de esperanza, a cuidar y proteger la esperanza como algo sagrado. En tiempos de prueba, estas organizaciones jesuitas, sostenidas por esta fe, emergen como luces de esperanza en medio de la oscuridad. Porque más allá de la ayuda material, se trata de dar un mensaje profético y de esfuerzo compartido: no estamos desamparados. La buena noticia de la esperanza peregrina y jubilar, que es el mismo Jesús, se mantiene firme y sólida. Nos recuerda que la dignidad humana no se puede socavar, y que, en la acción generosa que la defiende, se encuentran las semillas de una necesaria base para hacernos más humanos.
![Redada de inmigrantes en el aeropuerto de Texas](/2025/01/02/mundo/Redada-inmigrantes-aeropuerto-Texas_2739636036_17489412_667x375.png)
El trabajo de estas redes hermanas, más allá de la suspensión de fondos, no se detiene.
Cuando los recortes pretenden apagar las voces del pueblo mas doliente. Con fuerzas muy organizadas debemos redoblar la convicción profunda de que la adversidad no apaga la luz de la solidaridad. Cuando se apaga una luz, otra se enciende... Las organizaciones jesuitas siguen con su misión, convencidas de que la verdadera solidaridad no depende solo de los recursos materiales, sino de la valentía para seguir caminando juntos, a pesar de los obstáculos. La fe en la acción compartida sigue siendo el motor que impulsa a la comunidad a seguir adelante, con la esperanza de que el apoyo necesario y compartido por todos seguirá estando presente. En la adversidad, las redes de apoyo continúan tejiendo un futuro donde la esperanza nunca muere, y donde la solidaridad no solo es de lo que se habla sino lo que se practica
Una Llamada a la Acción Global
En última instancia, las políticas actuales que recortan la ayuda humanitaria nos exigen una reflexión profunda sobre qué tipo de mundo queremos construir. La solidaridad no puede ser vista como un gasto, sino como una inversión en la dignidad humana. Es fundamental que los gobiernos y las instituciones internacionales se mantengan firmes en su compromiso con los más vulnerables, y que la comunidad global no permita que los retrocesos políticos y económicos destruyan lo que tanto ha costado construir. La esperanza no es un lujo, es una necesidad para todos, y debe ser defendida con la defensa de los que menos esperanza tienen.
![Redadas en iglesias: la nueva orden de Trump](/2025/01/22/america/Redadas-iglesias-nueva-orden-Trump_2745635410_17521019_667x375.png)
Encenderla es nuestra misión. No los recuerda Eduardo Galeano:
Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo. A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.—El mundo es eso —reveló—. Un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
Y esto, hoy día, frente a populismos de todo tipo que se ejercen sin pudor –desde el poder, desde los nuevos dominadores de los relatos y desde las conversaciones cotidianas- no es un cuento, sino una necesidad imperiosa para la supervivencia. De todos.