En Manaos, del 23 a 26 de agosto 2ª Asamblea de la CEAMA: “Oportunidad para que crezcamos en la comunión con Dios, entre nosotros y con la Amazonía”
Seguir caminando juntos y comprometidos a estrechar nuestros vínculos en una Iglesia Sinodal en Misión”
“Buscar respuestas concretas y sustanciadas que den razón de nuestra esperanza y que hagan que el llamado tan importante que tenemos como CEAMA, sea una semilla pequeñita que crece poco a poco, pero que puede ir avanzando para dar más frutos”
La CEAMA “es más vivida que conceptualizada, es una experiencia en construcción”
La CEAMA “es más vivida que conceptualizada, es una experiencia en construcción”
Luis Miguel Modino, corresponsal de RD en América Latina y Caribe
La 2ª Asamblea presencial de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA), que se celebra en Manaos de 23 a 26 de agosto de 2024, con el tema “Cristo apunta a la Amazonía: Comunión, Misión y Participación”, y el lema “Hagan lo que Él les diga” (Jn. 2,5), ha tenido su inicio con una celebración eucarística y la abertura oficial del evento.
Belleza del Reino de Dios que nos atrae
En la Eucaristía, el arzobispo local, cardenal Leonardo Ulrich Steiner, comparó el Reino de Dios con “un modo de ser, un modo de convivir, un modo de amar, un modo de servir”, destacando la “capacidad de la persona humana para establecer relaciones libres, recíprocas y solidarias”. Un Reino de Dios que “no podemos definir, pero que nos atrae”, destacando que, en esta asamblea, “el Reino de Dios debe guiarnos, debe iluminarnos, debemos darnos cuenta de cómo somos atraídos, no por una organización, sino por el Reino que habla»”, insistiendo en que “la belleza del Reino de Dios que nos atrae, afecte a nuestros pasos en estos días, a nuestras discusiones, a nuestras reflexiones, a nuestras búsquedas”.
Consolidar la identidad de la CEAMA
En la abertura de la Asamblea, donde participa el prefecto del Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral, cardenal Michael Czerny, después de dar la más cordial bienvenida en nombre de la presidencia, el cardenal Pedro Barreto, inspirado en Karl Rahner, afirmó que “estamos viviendo un tiempo de gracia, un Kairós, el tiempo de Dios, el momento adecuado y oportuno para consolidar nuestra identidad como CEAMA, expresión de una Iglesia sinodal en Misión en la Amazonía”, recordando las palabras del Informe de Síntesis de la Primera Sesión de la Asamblea Sinodal del Sínodo de la Sinodalidad, que dice: “en todos los contextos culturales, los términos ‘sinodal’ y ‘sinodalidad’ indican un modo de ser Iglesia que articula comunión, participación y misión. Ejemplo de ello es la Conferencia Eclesial Amazónica (CEAMA), fruto del proceso sinodal misionero en esa región”.
Una referencia que, en palabras de su presidente, motiva a la CEAMA, “a seguir caminando juntos y comprometidos a estrechar nuestros vínculos en una Iglesia Sinodal en Misión”. Para ello, Barreto ve la asamblea como “la oportunidad para que, en estos días, crezcamos en la comunión con Dios, entre nosotros y con la Amazonía”, viendo necesario la participación de todos y cada uno. Para ello pidió, siguiendo el ejemplo de María, “escuchar, discernir y poner en práctica lo que el Espíritu nos inspire para ser una Iglesia sinodal en Misión que peregrina en la Amazonía”, y junto con ello, que “el Espíritu santo sea el protagonista”.
Fortalecer y consolidar caminos
Junto con el presidente, intervinieron los vicepresidentes, definiendo la asamblea como “un momento significativo para nuestra Iglesia aquí en la Amazonía, donde cada vez más vamos buscando nuevos caminos para la Iglesia y para una ecología integral”, como señaló la Hna. Laura Vicuña Pereira Manso, que recordó la metodología de conversación en el espíritu usada para preparar esta asamblea, “momento de fortalecer, de consolidar estos nuevos caminos que tanto buscamos aquí en la Amazonía, y fortalecer nuestro camino en la defensa de la tierra, la defensa de la vida y la defensa de los derechos”.
Una asamblea a la que Mauricio López invitó a traer presente “este Pueblo de Dios en camino en cada sitio donde están, para que lo traigan aquí presente”. En un momento en que “las cosas no están mejor para la Amazonía”, con una violencia presente, llamó a tenerlo presente en la asamblea. Desde la responsabilidad de cada uno, cuestionó “cuánto hemos hecho que esa semilla dé frutos”, llamando a no enterrar los talentos de cada uno para que la CEAMA dé vida en abundancia, para producir y contagiar vida, con lo poco o mucho que tenemos.
De cara a la segunda sesión de la asamblea sinodal, dijo que tiene el mismo desafío de la CEAMA: “buscar respuestas concretas y sustanciadas que den razón de nuestra esperanza y que hagan que el llamado tan importante que tenemos como CEAMA, sea una semilla pequeñita que crece poco a poco, pero que puede ir avanzando para dar más frutos”.
Más vivida que conceptualizada
Por último, el obispo auxiliar de Manaos y vicepresidente de la CEAMA, Mons. Zenildo Lima, afirmó que la CEAMA “es más vivida que conceptualizada, es una experiencia en construcción, y por ser una experiencia en construcción, a veces hasta necesitamos más claridad”, una dinámica presente desde el Sínodo para la Amazonía, que, ante la “necesidad de una experiencia que pudiera expresar la comunión de todas las iglesias panamazónicas, no teníamos mucha claridad conceptual sobre qué proponer a la Asamblea Sinodal, pero estábamos seguros de la experiencia que necesitábamos”.
Por eso, la asamblea “aporta más solidez a nuestras comprensiones, a los conceptos, a nuestra autocomprensión”, pero sobre todo ‘la experiencia se vuelve más clara”, viendo la asamblea como un momento en el que “la continuidad de la experiencia nos hace cada vez más conscientes del papel de la Iglesia en la construcción de nuevos caminos para la evangelización y para una ecología integral”.