El arzobispo de París le ha prohibido ejercer cualquier actividad pastoral y terapéutica Anatrella, 'el psiquiatra de la Iglesia', inhabilitado por abusos a sus pacientes
Conocido como ‘el psiquiatra de la Iglesia’, fue denunciado por algunos de sus pacientes varones de haberles practicado "terapias corporales" destinadas a "curarles" de su homosexualidad y que desembocaron en abusos sexuales, por lo que fue investigado ya durante la década pasada
El sacerdote psicoanalista “era a quien los obispos y los responsables religiosos remitían a los clérigos con dificultades psicológicas” y gozó de una gran protección por parte de los arzobispos de París hasta que, en 2016, finalmente, la diócesis abrió una investigación interna
El conocido sacerdote y psicoanalista francés Tony Anatrella (1941), especializado en el estudio de la sexualidad y la homosexualidad de los adolescentes, ha sido inhabilitado por la archidiócesis de París, donde estaba incardinado, para ejercer cualquier tipo de actividad pastoral y terapéutica.
Así, las medidas decretadas el pasado mes de diciembre por el arzobispo Laurent Ulrich contra él le prohíben celebrar misa públicamente, confesar, publicar libros, participar en actos públicos o coloquios y acompañar espiritualmente a los fieles, según recoge el diario Liberation.
Colaborador de dicasterios vaticanos
Anatrella, acusado por varios antiguos pacientes de violencia sexual, desarrolló en la década de los 90 del siglo pasado un discurso contrario a los derechos civiles para el colectivo homosexual y se declaró igualmente contrario a la ordenación sacerdotal de los gais, habiendo colaborado como asesor en dicasterios vaticanos.
Conocido como ‘el psiquiatra de la Iglesia’, fue denunciado por algunos de sus pacientes varones de haberles practicado "terapias corporales" destinadas a "curarles" de su homosexualidad y que desembocaron en abusos sexuales, por lo que fue investigado ya durante la década pasada.
Decepción de las víctimas
Sin embargo, las víctimas de Anatrella se han sentido decepcionadas por la sanción, pues consideran que debería haber sido expulsado del estado clerical. "Esta decisión no es coherente. Los cargos contra Anatrella son tan graves que deberían haber provocado su despido", declaró a Libération Nadia Debbache, abogada de los demandantes.
Según abunda el rotativo galo, esa decisión la habría tomado en julio de 2022 la Congregación para la Doctrina de la Fe, dado que, según una nota interna, "algunos elementos no han sido retenidos por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, en beneficio de la duda, y otros elementos, aunque probados, se consideran prescritos".
Invitado por Ouellet a un acto en febrero
La indignación de las víctimas también tiene que ver con la presencia de Anatrella, en febrero de 2022, en un simposio internacional sobre las vocaciones organizado en Roma por el cardenal canadiense Marc Ouellet, lo que “había provocado un escándalo” y que “el caso Anatrella, que hasta entonces había tenido escasa repercusión mediática más allá de las fronteras francesas, adquirió en esta ocasión una dimensión internacional”.
Según Liberation, el sacerdote psicoanalista “era a quien los obispos y los responsables religiosos remitían a los clérigos con dificultades psicológicas” y asegura que gozó de una gran protección por parte de los arzobispos de París hasta que, en 2016, finalmente, la diócesis abrió una investigación interna.