"Nadie sabe lo que saldrá al final (...), cada paso es importante" Bätzing: "Los temas del Camino Sinodal están en la mesa de la Iglesia universal"

Bätzing, con el Papa durante el Sínodo
Bätzing, con el Papa durante el Sínodo © M. Kopp/Deutsche Bischofskonferenz

Bätzing entiende su presencia en la Asamblea como un "mandato claro" para llevar los temas del Camino Sinodal al Vaticano. "Y lo hago fiel y resueltamente"

El presidente del Episcopado alemán cree que el proceso sinodal está siendo muy abierto, lo que puede generar "cierta falta de claridad", lo que supone "bastante tensión"

El Camino Sinodal no está muerto, ni mucho menos. Después de la marcha de Ouellet y Ladaria, dos de sus principales enemigos en la Curia romana, el proceso de discernimiento de la Iglesia alemana ha llegado, con naturalidad, a Roma, y se ha insertado en el aula del Sínodo de la Sinodalidad. Al menos, así lo asegura el presidente de la Conferencia Episcopal alemana, Georg Bätzing, quien ha asegurado que "todos los temas importantes" de los foros del debate en su país "están sobre la mesa de la Iglesia universal".

Te regalamos ‘Informe RD – Claves del Sínodo de la Sinodalidad’

En una entrevista en el portal de la diócesis de Limburgo (de la que es titular), Bätzing recalca que la sola presencia de la 'agenda alemana' en el Sínodo "es un gran paso adelante", aunque admitió que "muchas cuestiones no podrán resolverse rápidamente".

Bätzing entiende su presencia en la Asamblea como un "mandato claro" para llevar los temas del Camino Sinodal al Vaticano. "Y lo hago fiel y resueltamente", afirmó, subrayando cómo mcuhos de los problemas planteados por otras iglesias "son similares, pero también diferentes".. como ejemplo, puso la cuestión de la participación de la mujer en la Iglesia, un tema "acuciante" en todos los continentes.

Sínodo
Sínodo

"Está creciendo gradualmente, y desde diferentes perspectivas, una visión común sobre la cuestión de cómo queremos vivir la sinodalidad en la Iglesia católica en el futuro, y cómo podemos aclarar las muchas cuestiones y problemas entre nosotros sinodalmente", dijo el presidente del episcopado alemán.

Respecto al futuro, Bätzing considera que el proceso del Sínodo Mundial está muy abierto. "Nadie sabe lo que saldrá al final (...), cada paso es importante", aunque admitió que dicha apertura genera "cierta falta de claridad", lo que supone "bastante tensión".

Volver arriba