A sus 41 años, Ricardo Ceccobelli celebró el pasado 11 de abril su última misa dominical en la la localidad de Massa Martana, provincia de Perusa, en pleno centro de la península italiana. En un alarde de sinceridad, el párroco declaró su intención de colgar los hábitos arguyendo que no puede evitar “seguir siendo coherente, correcto y transparente como siempre lo he sido hasta ahora”.
Según ha informado el Corriere della Sera, el anuncio de Ceccobelli, que parece no haber sorprendido a los habitantes de la población, se produjo en presencia del obispo Gualtiero Sigismondi, cuya diócesis ya ha iniciado los trámites pertinentes para devolver al párroco a la condición de laico.
“Agradezco a don Riccardo por el servicio realizado hasta ahora y le envío mis más sinceros deseos para que esta elección, hecha en plena libertad como él mismo me dijo, pueda garantizar la paz y la serenidad”, dijo el obispo.
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