"Los coros, los cantores, la banda, dignifican, solemnizan la liturgia cristiana" Parroquia San Juanito y la música: "Sea nuestra vida una hermosa canción"

"Sea nuestra vida una hermosa canción
La música es el arte más directo,
entra por el oído y va al corazón…
Es la lengua universal de la humanidad"

Astor Piazzolla

San Pablo en 1 Cor 14,7 nos dice que los instrumentos musicales producen cada uno sus notas, su melodía, que juntos, en armonía hacen la orquesta, la banda, el coro. Todos son necesarios y enriquecen a los demás.

Toda la parroquia, todos podemos sumarnos a esta bella alabanza que tiene tantos siglos, del salmo 91 que nos regaló otro creyente, el salmista.

2.Es bueno dar gracias al Señor y celebrar tu nombre, Dios Altísimo,
3.proclamar tu amor por la mañana y tu fidelidad durante la noche,
4.con liras de diez cuerdas y cítara y un suave acompañamiento de arpa.
5.Pues me alegras, Señor, con tus acciones; yo exclamo al ver las obras de tus manos:
6."¡Cuán grandes son tus obras, oh Señor, y cuán profundos son tus pensamientos!"
Sal 91 ♪

Agradezco al maestro Mauro Ramírez Pérez, director de la Orquesta Sinfónica infantil y juvenil de San Martín Mexicapan su sincera y excelente colaboración con la parroquia de San Juanito, en las Misas, en las fiestas del día de la madre, del niño, de San Juan Bautista. Ha sido un honor compartir una tarde en su casa en este mes de junio. De su sabiduría musical han salido grandes músicos para la Banda del Estado de Oaxaca, para otras Bandas nacionales, para diversas Orquestas, y con Omar García la Banda Infantil de San Juanito. Un buen grupo de jóvenes músicos han tocado ya en España.

Los coros, los cantores, la banda, dignifican, solemnizan la liturgia cristiana, y el pueblo cristiano se dirige a Dios con alegría.

El salmo 150, el último de todos, nos invita a cantar, alabar a Dios en los diversos momentos de la vida, como GRAN ORQUESTA o BANDA que canta a su Director.

Es la oración, poesía y canción de la buena del pueblo de Israel y ahora es también la oración de la IGLESIA que reza y canta algunas de estas oraciones cada día. Jesús cantó algunos de estos salmos también.

“Los Salmos constituyen una de las formas más elevadas de oración que ha producido la humanidad. Millones y millones de personas, judíos, cristianos y religiosos de todas las tradiciones, cada día recitan y cantan salmos”, dice L. Boff.

Los salmos son la colección poética más leída de la humanidad. La poesía religiosa y mística llega a su máxima expresión por esta teología, oración, poesía, canción.

Los salmos son como el ave que vuela, con esas dos alas: petición y alabanza.

Este salmo 150 se resume en esta urgencia, en esta orden, en este imperativo musical que repite 10 veces ALABAD, alaben. Se nombran siete instrumentos de música de la orquesta del Templo de aquel tiempo.
La oración bíblica cuanto más avanza, más conoce y vuela hacia Dios.

Aquí comienza alabando al Dios presente en el cosmos, la naturaleza y termina alabándolo con el nombre propio de Dios o Yahvé. Nos invita a sumarnos a todos los seres humanos.

Con una hermosa metáfora, personalizada en los instrumentos musicales que representan a diversos sectores-profesiones, diversas etapas de la vida, donde todos y cada uno con su riqueza y personalidad, solistas o en grupo, hacen que el tempo fuera escuela de oración, y hoy la iglesia, templo, parroquia, familia, es escuela de oración, poesía y canción.

Sus ensayos, etapas, para cantar esta alabanza:

EN DÓNDE orar y este creyente músico nos responde en el v. 1 que en el santuario, en la naturaleza. Todo lugar, cuando Él anda por medio es lugar-espacio de oración.

DE QUÉ, POR qué oramos o alabamos, en el v. 2 nos da la pista, por sus obras o grandes hazañas, y por su inmensa grandeza.

CON qué, y pone a nuestra disposición estos 7 instrumentos que nos indican la música y melodía vv.3-5.

La alabanza, la canción, para que sea total necesita la participación de todos los instrumentos, de todas las notas, es decir de todas las naciones, razas, civilizaciones, idiomas, culturas.

Sinfonía universal, la gran orquesta

Es la trompeta, que representa la voz de Dios, la primera que convoca, provoca, invita, susurra, suena. Es el sonido de la campana que llama, convoca, invita…

Es el arpa y la cítara, instrumentos de cuerda que nos recuerdan la corte celestial, que tenemos que afinar, armonizar con la vida, la voluntad, la música de Dios. Cuando en nuestro lenguaje popular decimos, canta como los ángeles, es decir tenemos que armonizar la música divina con nuestro actuar humano. Fe y vida tienen que ir juntas sino no es música divina…

Es el tambor y la danza. El primero acompaña a los peregrinos y la danza especialmente con las mujeres, es lo que no se puede expresar con la palabra en la oración, es lo poético del cuerpo hecho canción, lo que va más allá de lo cotidiano.

Es el laúd, instrumento solista, para los momentos de matrimonio, y en los funerales. Amor y muerte presentes.

Es la flauta, instrumento solista, de los pastores, para enamorar.

Los címbalos, platillos sonoros de aclamación, con las palmas de las manos, con la voz humana.

Y un deseo hecho oración. Además de esta orquesta, que todo cuanto respire alabe al Señor.

En la Banda de San Juanito hay otros instrumentos: Saxofón alto, tenor y soprano, clarinete, bajo o sausofón, barítono, timbales, trombón, euphonium, flautín.

150 ♪ Sea nuestra vida una canción
Brotes de Olivo, nació 1971

“SOMOS MISIONEROS DEL VERBO DIVINO”
Letra y música: SVD Brasil  
Adaptación: SVD Ecuador
Transcripción: Banda San Juan

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