Iridiscencias sinfónicas
¡Feliz miércoles! Bello título para una bella composicón. Poco a poco intento que la música de distintos compositores españoles vayan apareciendo por aquí para que los conozcamos. Hoy tenemos a otro del que hace tiempo que no escuchamos música aquí.
Hoy nos visita Amando Blanquer (1935-2005), compositor valenciano nacido en la localidad alicantina de Alcoy. Desde pequeño su primer contacto con la música fue la banda de su ciudad natal y estudió flauta, trompa, violín, piano y armonía. Luego empezó a componer marchas y pasodobles para las fiestas locales, género que cultivó durante toda su vida. Luego se matriculó en el conservatorio de Valencia y obtuvo un premio extraordiario de fin de carrera. Posteriormente pasó a París y allí le dieron clase Olivier Messiaen y Goffredo Petrassi. En 1965 alcanzó el puesto de catedrático de contrapunto y composición en el conservatorio y allí llevó a cabo una gran labor pedagógica. En su música usa una gran riqueza armónica y tímbrica, y experimenta con escalas modales.
La obra de Blanquer que vamos a escuchar se titula Iridiscencias Sinfónicas. Es una composición para banda que fue compuesta en 1985. Fue un encargo de la Consejería de Educación y Ciencia de Valencia (para conmemorar un centenario de un certamen de bandas) y el maestro la concibió en forma de fantasía sonora. Fue estrenada al año siguiente por un conjunto holandés. Desde el primer momento la obra tuvo una gran aceptación e inmediatamente fue incorporada al repertorio de muchas bandas. Posteriormente Blanquer realizó una versión para orquesta sinfónica. Los colores son muy abundantes (requiere de hasta siete percusionistas) y todo ello se plasma en una importante e interesantísima composición de madurez.
La interpretación es de la Sociedad Musical La Paz De Sant Joan D'Alacant dirigida por Juan Antonio Espinosa Zaragoza.