¡Feliz sábado! Puesto que es sábado, vamos a disfrutar de música dedicada a la Virgen, que es lo que hacemos siempre. Creo que el compositor de hoy es la primera vez que aparece en este humilde blog. ¡Aún nos queda tanto por descubrir!

Se trata de Bartolomeo Barbarino (¿?-después de 1640), compositor italiano nacido en Fabriano. En 1593 aparece como cantor en la voz de alto en Loreto. Hasta 1602 estuvo al servicio de monseñor Giuliano della Rovere en Urbino y es posible que durante ese tiempo también sirviese al duque de esa localidad. Su apodo era il Pesarino porque fue organista de la catedral de Pésaro. A partir de 1608, y durante arios años, se estableció como músico autónomo en Venecia, cantando de vez en cuando en la capilla de San Marcos. Fue uo de los primeros compositores que usó la monodia y casi todo lo que escribió, y fuese sagrado o profano, es para voz solista y continuo. Muchas de esas composiciones son madrigales para los que solía escribir el texto. Su primer libro de motetes a solo continue los ejemplos más antiguos de monodias sagradas preparadas para ser cantadas en contextos litúrgicos.

Escuchemos su Ave Reina Coelorum. Obviamente, es una obra monódica, en la que la voz canta el himo mariano con una intensidad y una emoción muy particulares. El maestro sabe elegir cuidadosamente las palabras en las que colocar los melismas. Puesto que Barbarino tenía una voz de alto, eso se aprecia en cómo es capaz de adaptarse perfectamente a esa tesitura. Al contrario que otros contemporáneos, el pesarés solo usó el estilo moderno, de forma que la composición es una verdadera bocanada de aire fresco.

La interpretación es de Matthias Lucht (contralto) y Jürgen Banholzer (clave).