"Los cruces que ambos vienen manteniendo preanuncian un vínculo tormentoso" Argentina: ¿Cómo sería la relación de Francisco con Milei si llega a la Casa Rosada?
¿Cómo sería la relación entre el Papa Francisco y Javier Milei en caso de que el ultraliberal llegara a la presidencia? Los cruces que ambos vienen manteniendo -abiertos de parte del candidato de La Libertad Avanza, soterrados de parte del Pontífice- preanuncian un vínculo tormentoso con quien disputará el la vuelta de las elecciones argentinas de del 19 de noviembre con Sergio Massa (Unión por la Patria)
Aunque la visita del pontífice no depende de quién gane las elecciones, los cruces indirectos que tuvieron en la previa podrían reflejar el país que viene. La construcción de vínculos con la Iglesia, marcarían el camino
(Valores Religiosos).- ¿Cómo sería la relación entre el papa Francisco y Javier Milei en caso de que el ultraliberal llegara a la presidencia? Los cruces que ambos vienen manteniendo -abiertos de parte del candidato de La Libertad Avanza, soterrados de parte del Pontífice- preanuncian un vínculo tormentoso con quien disputará la vuelta de las elecciones argentinas del 19 de noviembre con Sergio Massa (Unión por la Patria). Aunque la visita del Pontífice a Argentina no depende de quién gane las elecciones, los cruces indirectos que tuvieron en la previa podrían reflejar el país que viene. La construcción de vínculos con la Iglesia, marcarían el camino.
¿Pero efectivamente sería así? ¿Se moderaría Milei por aquello de que una cosa es la actitud que se asume en la campaña y otra la que se tiene cuando se llega al gobierno? ¿O la personalidad explosiva del libertario se impondría? ¿El Papa evitaría criticarlo y sería un límite para las bravuconadas de Milei? Veamos.
Por lo pronto, nunca pasó que un Papa se saque chispas con un candidato a presidente de la Argentina, si bien es cierto que pertenece al mismo país. Pero no es la primera vez que Francisco tiene roces con un aspirante a presidente. En 2015 criticó nada menos que a Donald Trump por la propuesta del republicano de extender el muro entre los Estados Unidos y México. “Una persona que piensa solo en hacer muros, sea donde fuere, y no puentes, no es cristiana”, le dijo a los periodistas en el vuelo de regreso tras visitar Estados Unidos.
El antecedente con Trump
Dos años después, el Papa recibió la visita de Trump ya siendo presidente, ocasión en la que tuvieron una reunión correcta. En 2019 el mandatario norteamericano lo llamó para solidarizarse por el incendio en la catedral de Notre Dame y ofrecerle la ayuda de expertos en reconstrucciones. Pero las diferencias siempre existieron. El jefe de campaña de Trump, Steve Bannon, fue el principal enemigo estadounidense del Pontífice, llegando a crear una fundación opuesta a la línea de Francisco con sede en las afueras de Roma.
No debería sorprender que los nuevos cortocircuitos del Papa con un candidato a presidente sean con alguien alineado con Trump como Milei. Al fin y al cabo, el expresidente estadounidense y el candidato argentino abrazan la misma concepción conservadora y -sobre todo Milei- económicamente ultraliberal (además de que tienen en común los modos destemplados). Lo que los coloca en las antípodas de la Doctrina Social de la Iglesia -que defiende el papel del Estado- enarbolada por Francisco, más allá de su impronta progresista.
"La encarnación del Maligno”
La descalificación de Milei hacia el actual Pontífice no es reciente. Hace cinco años -cuando participaba como panelista en programas de radio y televisión, y también a través de las redes sociales- el libertario era muy duro con Francisco. No sólo cuestionaba los principios que el Papa reivindica -como la justicia social, que para el candidato de La Libertad Avanza es “robarle al que trabaja” para dárselo a quien no lo merece-, sino que decía que era “la encarnación del Maligno” y le propinaba insultos soeces.
Francisco nunca reaccionó. Pero durante la serie de entrevistas que dio en marzo a medios argentinos con motivo del décimo aniversario de su papado pareció aludir a Milei, por entonces en franco ascenso en sus aspiraciones para llegar a la presidencia. Al advertir sobre el riesgo que entrañan los internistas políticos feroces, citó el libro “Síndrome 1933″, de Siegmund Ginzberg, que relata las pujas internas durante la llamada República de Weimar, en Alemania, que dieron paso al ascenso de Adolf Hitler.
Tras las PASO y la misa de desagravio a Francisco que oficiaron los curas villeros por las descalificaciones de Milei, el libertario dijo que los sacerdotes se basaron en afirmaciones suyas de varios años atrás y que desde que abrazó la política no profería esas injurias. Y que lo respetaba como jefe de la Iglesia y de Estado. Pero 48 horas después, en una entrevista con el muy polémico periodista norteamericano Tucker Carlson acusó al Papa de “tener afinidad con dictadores comunistas sangrientos”.
En el primer debate presidencial, increpado por el candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, por “haber descalificado al argentino más importante de la historia”, Milei dijo que ya se había disculpado con la Iglesia. Sin embargo, nadie en los medios eclesiásticos pudo confirmar que tales disculpas se hayan concretado. Paralelamente, allegados al candidato de La Libertad Avanza procuraban discretamente un encuentro con la cúpula del Episcopado para acercar posiciones.
Los flautistas de Hamelín
En el tramo final de la campaña se conocieron declaraciones del Papa a la agencia Télam en las que decía tenerle “mucho miedo a los flautistas de Hamelin”, en alusión a la leyenda alemana que narra a un flautista que con el sonar de su instrumento conducía encantadas a las ratas hasta un río donde perecían ahogadas. “Si fueran de serpientes los dejaría, pero son encantadores de gente”, dijo. ¿Mensaje para los votantes de Milei?
Y completó: “Todos fuimos jóvenes sin experiencia y a veces los chicos y las chicas se aferran a milagros, a mesías, a que las cosas se resuelven de manera mesiánica. El Mesías es uno solo, que nos salvó a todos. Los demás son todos payasos del mesianismo”. ¿Mensaje para tantos jóvenes que, según las encuestas, van a votar al candidato de La Libertad Avanza, atraídos por ser una figura novedosa de la política?
En el acto de cierre de campaña de Milei, su gran referente intelectual, Alberto Benegas Lynch, se despachó diciendo ser partidario de que, si Milei llegaba a la presidencia, iba a romper relaciones con el Vaticano “mientras en su cabeza prime el espíritu totalitario”. El arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, se mostró “azorado” y afirmó que lo que el país necesita es unidad y no una nueva grieta.
Finalmente, Milei negó tener en sus planes “romper relaciones con el Vaticano”, consideró que la afirmación de Benegas Lynch fue personal, defendió la libertad de expresión dentro de su espacio y señaló que si el Papa viene al país lo recibirá “con todos los honores de jefe de Estado” y con el reconocimiento de “alguien que es el líder espiritual de los católicos.”
Paralelamente, fuentes cercanas a Francisco reiteraron que la visita del Papa a la Argentina no depende de quien gane las elecciones, porque él va a encontrarse con los católicos en particular y los argentinos en general, no con los gobernantes. Porque como todas las visitas papales “es pastoral”, o sea, centralmente religiosa.
Pero evidentemente cómo construya Milei, si llega a ser presidente, la relación con el Papa y con la Iglesia -ambos grandes promotores del diálogo multipartidario y multisectorial para sacar al país de la crisis- revelará en buena medida su modo de gobernar y acaso también qué futuro le deparará a él y al país.