En la víspera de todos los santos La Iglesia argentina comienza una campaña para pedir por canonización de sus beatos
El Episcopado promueve la iniciativa con el objetivo de que el pueblo fiel esté unido en oración para pedir la propia santidad, teniendo como modelos y faros a quienes peregrinaron por esta tierra y dejaron huellas de vocación y compromiso cristianos
El desafío es ayudar al pueblo a profundizar la fe a la luz de la Palabra de Dios, un reto que no se acaba. "Seremos pocos, pero estamos llamados a ser, en medio del mundo, valientes y alegres servidores del Evangelio"
| RD/Agencias
En la víspera de la Solemnidad de Todos los Santos, monseñor Santiago Olivera, delegado episcopal para las Causas de los Santos, presentó el material preparado por la delegación episcopal para colaborar con la celebración de esta Solemnidad y dio detalles sobre el mensaje que pretenden transmitir desde el Episcopado y el desafío sobre la conciencia de la llamada universal a la santidad.
“Estamos por celebrar la 26° Jornada Nacional de oración por la Santificación del pueblo argentino y la Glorificación de sus siervos de Dios. Queremos compartir y presentarles estas iniciativas que ayuden a nuestro pueblo y a cada uno de nosotros, para rezar por esta vocación que nos iguala a todos, que es la santidad”. De este modo, el obispo castrense presentó el material preparado para tal ocasión.
Estos subsidios son un aporte para facilitar la celebración de la Solemnidad de todos los Santos, este 1° de noviembre, animar la oración por la santidad, y acercarnos y conocer mejor a nuestros santos, beatos y siervos de Dios.
Olivera puntualiza que un subsidio, un triduo, un guion para la misa y las letanías para invocar a los santos y beatos argentinos son los materiales preparados para facilitar la celebración de la Jornada. Incluso escribió una carta en la que afirma que, "conociendo los frutos pastorales que se pueden obtener", solicita a todos los sacerdotes la amabilidad de recordar y animar a los fieles, invitándolos a comprometerse con la oración del triduo propuestos por distintas intenciones.
La Delegación de la Conferencia Episcopal Argentina hizo llegar el material a diócesis y parroquias, para que el pueblo fiel esté unido en oración para pedir la propia santidad, teniendo como modelos y faros a quienes peregrinaron por esta tierra y dejaron huellas de vocación y compromiso con el proyecto de Dios.
Asimismo, el obispo recordó que “Bautismo y santidad es una llamada para vivir nuestra vida en clave cristiana, para dejar que Dios obre con su Espíritu en nosotros, nos transforme y podamos responder a nuestra vocación”.
No obstante, Olivera considera que aún hay múltiples desafíos pendientes: destaca el de descubrir verdaderamente que el camino hacia la santidad exige una vida exigente. "No vivir en la mediocridad implica ser hombres y mujeres de oración", sostiene el prelado. El desafío es ayudar al pueblo a profundizar la fe a la luz de la Palabra de Dios, un reto que no se acaba. "Seremos pocos, pero estamos llamados a ser, en medio del mundo, valientes y alegres servidores del Evangelio".
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