Gerald Kicanas cierra filas con Francisco y denuncia la "máquina del fango" contra él El obispo de Tucson insta a la Iglesia a "hacer lo que hace el Papa"
(Cameron Doody).- "Creo que el Papa Francisco nos está ayudando a alejarnos de algunos temas, que impiden ver lo que realmente implica ser un discípulo". A un mes de su jubilación como obispo de Tucson (Arizona), el obispo Gerald Kicanas ha instado a la Iglesia a evitar la polarización y a cerrar filas con el Papa Francisco, quien, dice, "está intentado ayudarnos a volver a la comprensión de que las Bienaventuranzas son la hoja de ruta de lo que realmente significa ser un discípulo".
En una entrevista con Crux en ocasión de su retirada del ministerio activo tras51 años de sacerdocio, el obispo Kicanas ha expresado su satisfacción con el Papa Bergoglio, hasta el punto de afirmar que su pontificado le está dando la razón con respeto a la moderación en cuestiones eclesiales y sociales que siempre ha defendido.
No solo eso, de hecho, sino que Kicanas siente que la persona y teología del Papa Francisco representa una rehabilitación de su mentor, el cardenal Joseph Bernardin de Chicago, ideólogo de la ética de la famosa "prenda sin costuras", según la cual la Iglesia debe dar un testimonio consistente de la sacralidad de la vida humana, sea en cuestiones del aborto, la pena de muerte, la eutanasia, los pobres, los refugiados o infinidad de cosas más.
En vez de esta búsqueda de moderación y consenso que buscaban Bernardin y Kicanas, no obstante, lo que observa el saliente obispo de Tucson en la Iglesia de hoy es una creciente y preocupante polarización. "Hay un valor en las diferentes opiniones" de la gente, dice el prelado, "pero lo que pasaes que nos tiramos piedras en vez de intentar entender o escuchar la perspectiva del otro y de entenderla mejor".
Pero no es que la polarización se vea solo en los medios, en los bancos de las parroquias o entre las filas del clero. Quizás lo que más le preocupe a Kicanas es que se haya infiltrado en las casas de formación de futuros sacerdotes. Por no decir nada de algunos sitios de Internet, "bastante alarmantes", a los que el obispo señala por presentarse como canales de difusión de la doctrina de la Iglesia, cuando en realidad son máquinas de fango que luego lanzan al Papa.
"Es preocupante.. que a veces nuestros seminaristas se estén alimentando de la polaridad que existe y de la maldad hacia el Santo Padre", declara el obispo de Tucson, observando que, por muy extendido que esté el fenómeno, "en todo caso, el llamado del Señor es por la unidad y en ocasiones no es donde nos encontramos".
En cuanto al futuro de la Iglesia en Estados Unidos, por último, Kicanas percibe que el enfoque del actual episcopado "está cambiando, por lo que los temas de la libertad religiosa y el aborto son menos prominentes ahora con la administración actual".
Aunque haya que imitarle al Papa aún más, dice el obispo, el "efecto Francisco" es el responsable de una sensibilización de cada vez mayor calado entre los obispos de que, en la época Trump, "los temas como la inmigración, la salud y los pobres -estas doctrinas fundamentales de la Iglesia- es donde la Iglesia tiene ahora que levantar la voz".