La pintura, inédita hasta 2011, tendrá un precio de salida de tres millones de euros Una 'Piedad' del joven Goya saldrá a subasta en Madrid el próximo 30 de noviembre
Será la casa de subastas Abalarte la que en su primera sesión del próximo 30 de noviembre saque a subasta "esta excepcional obra de juventud" de Francisco de Goya que puede datarse hacia el año 1774
Declarada inexportable en 2014 por considerarse "una obra de gran rareza, representativa del periodo temprano de la producción de su autor y por constituir uno de los pocos ejemplos de su obra religiosa"
"El estado de conservación de esta obra es muy bueno, casi excepcional, manteniéndose el bastidor antiguo y su tela de cáñamo original sin reentelar", han destacado desde Abalarte
"El estado de conservación de esta obra es muy bueno, casi excepcional, manteniéndose el bastidor antiguo y su tela de cáñamo original sin reentelar", han destacado desde Abalarte
| RD/EFE
Una 'Piedad' inédita hasta 2011 pintada por Francisco de Goya en su juventud, con un nivel de conservación "casi excepcional", saldrá a subasta en Madrid el próximo 30 de noviembre con un precio de salida de tres millones de euros.
Será la casa de subastas Abalarte la que en su primera sesión del próximo 30 de noviembre saque a subasta "esta excepcional obra de juventud" de Francisco de Goya que puede datarse hacia el año 1774, ya que muestra una relación estilística directa con las últimas escenas del ciclo de la vida de la Virgen que realizó el maestro aragonés en la iglesia de la cartuja de Aula Dei de Zaragoza.
Relacionada con obras que descubrió en Italia
Según ha informado a 'Efe' Abalarte, la composición de esta 'Piedad' de Goya, que tendrá un precio de salida de tres millones de euros, hay que relacionarla con la 'Piedad' de Annibale Carraci de la Galería Nacional de Capodimonte, también con la de Miguel Ángel en el Vaticano o con la que hizo para los Colonna, todas ellas obras que debió de conocer en su viaje a Italia.
Una obra que fue declarada inexportable en 2014 por considerarse "una obra de gran rareza, representativa del periodo temprano de la producción de su autor y por constituir uno de los pocos ejemplos de su obra religiosa, ayudando así a definir la figura del artista en su contexto".
Estuvo siempre en Zaragoza
En cuanto a la procedencia, "probablemente" esta obra de devoción estuvo siempre en Zaragoza ya que se sabe que, a mediados del siglo XX, pertenecía a un canónigo del Cabildo de la ciudad y, tras su fallecimiento, pasó a la familia zaragozana que lo tuvo hasta que, en 2008, lo adquirieron los actuales propietarios.
"El estado de conservación de esta obra es muy bueno, casi excepcional, manteniéndose el bastidor antiguo y su tela de cáñamo original sin reentelar", han destacado desde Abalarte. En el lienzo, y a través de la radiografía, han añadido desde la casa de subastas, se puede distinguir una figura masculina que recuerda a San Joaquín y un angelito, lo que muestra que, al igual que hizo con otras composiciones del mismo periodo, Goya reutilizó un lienzo anterior para pintar esta escena.
En el Museo del Prado
En 2012 esta obra ingresó en el Museo del Prado y fue una de las que se incluyó en 2015 en la exposición 'Goya y Zaragoza (1746-1775). Sus raíces aragonesas', muestra que acogió el Museo Goya de Zaragoza en colaboración con la Obra Social de Ibercaja, Fundación Goya en Aragón y el Museo del Prado.
En el catálogo de esta exposición, comisariada por Manuela Mena, se calificó este cuadro "de gran calidad en la que se destaca la magistral interpretación de la luz sobre las distintas superficies de la composición permitiendo atribuir esta pintura a Goya sin género de dudas".
Etiquetas