La Semana Santa y el futuro del Papado, en el #resumensemanal de RD Y al tercer día... (el Papa también) resucitó
Tuvimos dos grandísimas noticias. Una, la declaración de Venerable de Antoni Gaudí. Muy pronto os podremos dar muchas más noticias, incluso alguna literaria, sobre este particular. Y también, por fin, la disolución del Sodalicio de Vida Cristiana. Un primer paso, vendrán muchísimos más, porque no estamos al final de Pontificado, ni muchísimo menos
Buen domingo, feliz Pascua de Resurrección. Vivimos este domingo de Pascua en Roma, viendo cómo el Papa Francisco realiza la bendición Urbi et Orbi, el final de una semana dura, pero muy esperanzadora, en la que hemos visto a Francisco también, de alguna manera, resucitar ante nuestros ojos.
Ya le vimos el domingo de Ramos, ya le hemos visto también en la Basílica de San Pedro, ya le vimos en un momento especialmente emotivo, en la Regina Coeli, en la cárcel, este Jueves Santo.

Tenemos Papa para rato, tenemos Papa que además toma decisiones y las toma personalmente.
Este lunes tuvimos dos grandísimas noticias. Una, la declaración de Venerable de Antoni Gaudí. Muy pronto os podremos dar muchas más noticias, incluso alguna literaria, sobre este particular.
Y también, por fin, la disolución del Sodalicio de Vida Cristiana. Un primer paso, vendrán muchísimos más, porque no estamos al final de Pontificado, ni muchísimo menos.

Hemos visto a un Papa que ha firmado documentos en los que el Vaticano recuerda que no se tiene que cobrar por las misas, en los que el Vaticano recuerda que no se puede borrar los registros del bautismo, pese a que alguien quiera libremente apostatar.
Y hemos visto la reforma de la Academia de los Nuncios, que es uno de los grandes temas que faltaban en esta reforma de la curia y que no se había abordado hasta ahora.

En nuestro país hemos vivido una semana de pasión en las calles, pese al tiempo, que ha jugado a veces malas pasadas. Hemos visto pasos procesionales en la calle, hemos visto devoción. Un país que cada vez es menos católico, culturalmente al menos lo sigue siendo y lo demuestra en la calle.
Y no en los púlpitos y en la política como está sucediendo, o otra vez, de nuevo, en el tema del Valle de Cuelgamuros.
Ya es hora de trabajar juntos por una España mejor. Acaba la Semana Santa, empieza la Semana de Pascua. Resucitemos.