La Iglesia católica en China
La intromisión gubernamental china en la vida de la Iglesia Católica generó una profunda división en el interior de la comunidad. De hecho hay una "Iglesia subterránea", considerada clandestina por las autoridades a causa de su fidelidad a la Santa Sede y su independencia administrativa. Y hay una "Iglesia oficial", totalmente sometida al control de los organismos del estado.
En los últimos años la comunidad católica china ha padecido arrestos, detenciones, sesiones de reeducación, casos puntuales de destrucción de iglesias, prohibiciones de actividades religiosas, multas y consagraciones episcopales ilícitas..
En principio para los gobernantes chinos un buen católico es un buen ciudadano. Pero exigen, prioritariamente, el amor a la patria. y presionan a Iglesias y sacerdotes para que sean fieles a las directrices del partido comunista chino. Por eso las personas que quieren permanecer fieles a la Santa Sede están fuera de la legalidad y, por ello, deben vivir su fe en clandestinidad.
Desde el gobierno dividen para generar confusión. Compran voluntades ofreciendo coche, casa…
La única explicación plausible de que el catolicismo persista en esa condiciones es porque Dios está detrás.