La apertura al pobre y necesitado nos humaniza La Cátedra de la Caridad Santo Tomás de Villanueva de la UCV se une a la celebración de la VII Jornada Mundial de los Pobres

(UCV).- La Cátedra de la Caridad Santo Tomás de Villanueva de la Universidad Católica de Valencia (UCV) se une a la celebración de la VII Jornada Mundial de los Pobres, que tendrá lugar el próximo domingo 19 de noviembre, para recordar que “la apertura al pobre y necesitado nos humaniza y nos ayuda a descubrir nuestras propias carencias y pobrezas”, en palabras de D. José Luis Sánchez García, vicario episcopal de Cultura y director de la Cátedra de la Caridad de la UCV.

D. José Luis Sánchez ha declarado que “la pobreza en la actualidad tiene muchas caras. Desde de las pobrezas materiales, más fácilmente identificables, a las pobrezas intelectuales, psicológicas y sobre todo espirituales, parcialmente ocultas. Debemos estar atentos para ser capaces de identificarlas y ser diligentes a la hora de ayudar a aquel que lo necesita”.

El director de la cátedra y de la línea de investigación Pobreza y Hambre de la UCV, ha apuntado que “desde la Cátedra de la Caridad, siguiendo el encargo de nuestro arzobispo y Gran Canciller de la UCV, Mons. Enrique Benavent, estamos trabajando en la identificación de las pobrezas humanas, que son muy variadas, y analizando las diferentes respuestas que se están dando en el mundo. Queremos proponer la Doctrina Social de la Iglesia como marco ético de referencia, que sustenta la labor caritativa de atención de todas esas pobrezas que tantas instituciones eclesiales llevan a cabo cada día, desde el anonimato, pero poniendo nombre a cada una de esas personas y acompañándolas en su necesidad concreta”.

Con motivo de esta jornada los investigadores de la línea de Pobreza y Hambre de la UCV se reunirán el próximo jueves 30 con vistas a preparar el “V Congreso internacional Pobreza y Hambre: Identificación y respuesta a las pobrezas humanas”, que abordará estas cuestiones.

El Dr. Sánchez ha destacado que “el Papa Francisco ha señalado en varias ocasiones lo que llama las«nuevas esclavitudes», las nuevas pobrezas de nuestro tiempo: los trabajos forzados, la prostitución, el tráfico de órganos, el narcotráfico, el crimen organizado, las migraciones forzadas, la esclavitud infantil, los jóvenes sin trabajo, los marginados sin hogar, las víctimas de violencia y la falta de nacimientos. Debemos analizar sus causas y luchar para erradicarlas, contribuyendo a ello cada uno desde nuestra realidad. No podemos dejar de lado al hermano, aunque no lo conozcamos”.

La jornada de este año se celebra bajo el lema «No apartes tu rostro del pobre» (Tb 4, 7). El Santo Padre nos recuerda en su mensaje que “no apartar el rostro del pobre conduce a obtener los beneficios de la misericordia, de la caridad que da sentido y valor a toda la vida cristiana” y ha animado a dejarse a guiar por el Espíritu Santo para que nos ayude a discernir y “reconocer las verdaderas necesidades de los hermanos”.

El vicario episcopal de Cultura de la archidiócesis de Valencia ha animado a que “seamos capaces de abrir nuestros corazones a todos aquellos pobres que se cruzan en nuestro camino. Ojalá nos dejemos interpelar por su necesidad y, conscientes de nuestras propias carencias y pobrezas, seamos luz y apoyo, con acciones concretas. Las grandes obras están hechas de pequeños pasos. No miremos hacia otro lado, no apartemos nuestro rostro de ningún pobre. Busquemos distintas soluciones para descubrir en esa acción nuestro compromiso: Cuando el pobre tiene rostro, para nosotros, pasa a ser familia. Lo siguiente sería su acogida plena como hermano, bien por nosotros mismos o bien colaborando con aquellas personas que lo puedan realizar en nuestro nombre”.

La Jornada Mundial de los Pobres se celebra cada año el domingo anterior a la festividad de Jesucristo, Rey del Universo, “para que en todo el mundo las comunidades cristianas se conviertan cada vez más y mejor en signo concreto del amor de Cristo por los últimos y los más necesitados”, en palabras del Santo Padre. La cita fue instaurada en 2017 por el Papa Francisco, con el objetivo de animar a los creyentes a reaccionar frente a la cultura del descarte y el derroche, transformándola por la cultura del encuentro, e invitando a todos, creyentes y no creyentes, a disponernos a compartir nuestra vida con los pobres, a través de gestos concretos de fraternidad.

La Cátedra de la Caridad Santo Tomás de Villanueva de la Universidad Católica de Valencia desarrolla una labor de investigación permanente a través de la línea Pobreza y Hambre, que reúne a más de 50 investigadores, cuya labor científica, de carácter multidisciplinar, tiene como eje estructural la denuncia de la pobreza, el hambre y la destrucción de alimentos, así como la propuesta de soluciones sostenibles que puedan contribuir a la erradicación de estas carencias. Además, la Cátedra de la Caridad incluye la reflexión y concienciación sobre todos aquellos temas sociales que necesitan análisis, investigación y propuestas de solución.