"La democracia es la respuesta más eficaz a posibles extremismos, personalismos y populismos" El Papa aterriza en Kazajistán condenando la "insensata y trágica guerra originada por la invasión de Ucrania"
"Necesitamos líderes que, a nivel internacional, permitan a los pueblos entenderse y dialogar, y generen un nuevo “espíritu de Helsinki”, la voluntad de reforzar el multilateralismo, de construir un mundo más estable y pacífico pensando en las nuevas generaciones. Y para hacer esto es necesario la comprensión, la paciencia y el diálogo con todos. Repito, con todos"
"Yo llego aquí mientras está en curso la insensata y trágica guerra originada por la invasión de Ucrania, mientras otros enfrentamientos y amenazas de conflictos ponen en peligro nuestra época. Vengo para amplificar el grito de tantos que imploran la paz, camino de desarrollo esencial para nuestro mundo globalizado"
"Una laicidad sana, que reconozca el rol valioso e insustituible de la religión y se contraponga el extremismo que la corroe, representa una condición esencial para el trato equitativo de cada ciudadano, además de favorecer el sentido de pertenencia al país por parte de todos sus elementos étnicos, lingüísticos, culturales y religiosos"
"Sé que se ha comenzado, sobre todo en los últimos meses, un proceso de democratización dirigido a reforzar las competencias del Parlamento y de las Autoridades locales y, en términos más generales, una mayor distribución del poder", destacó el Papa, quien pidió "proseguir hacia la meta sin volverse atrás"
"Una laicidad sana, que reconozca el rol valioso e insustituible de la religión y se contraponga el extremismo que la corroe, representa una condición esencial para el trato equitativo de cada ciudadano, además de favorecer el sentido de pertenencia al país por parte de todos sus elementos étnicos, lingüísticos, culturales y religiosos"
"Sé que se ha comenzado, sobre todo en los últimos meses, un proceso de democratización dirigido a reforzar las competencias del Parlamento y de las Autoridades locales y, en términos más generales, una mayor distribución del poder", destacó el Papa, quien pidió "proseguir hacia la meta sin volverse atrás"
Francisco ya están en Nursultán. En su primer discurso ante las autoridades, la sociedad civil y el Cuerpo diplomático, el Papa llevó a cabo una rotunda condena a "la insensata y trágica guerra originada por la invasión de Ucrania", al tiempo que mostró su objetivo de "amplificar el grito de tantos que imploran la paz, camino de desarrollo esencial para nuestro mundo globalizado".
"Necesitamos líderes que, a nivel internacional, permitan a los pueblos entenderse y dialogar, y generen un nuevo 'espíritu de Helsinki', la voluntad de reforzar el multilateralismo, de construir un mundo más estable y pacífico pensando en las nuevas generaciones. Y para hacer esto es necesario la comprensión, la paciencia y el diálogo con todos. Repito, con todos", clamó el pontífice, que también trazó una directa defensa de la democracia como "la respuesta más eficaz a posibles extremismos, personalismos y populismos".
Peregrino de paz, diálogo y unidad
Tras encontrarse con el presidente en el Palacio Presidencial, Bergoglio aseguró venir a Kazajistán "como peregrino de paz, en busca de diálogo y unidad" algo que, añadió, "nuestro mundo lo necesita con urgencia, necesita volver a encontrar la armonía".
Precisamente, la armonía, a través del instrumento tradicional de los kazajos, el dombra, fue uno de los ejes del primero de los seis discursos que dará en este país, tan cerca, tan lejos, de los tambores de guerra. El dombra, apuntó el Papa, es un "símbolo de continuidad en la diversidad" y de la importancia del respeto a las tradiciones.
El Papa recordó el viaje de Juan Pablo II a Kazajistán en 2001, que "lleva impresa una gloriosa historia de cultura, humanidad y sufrimiento". "¿Cómo no recordar, en particular, los campos de prisioneros y las deportaciones en masa que han visto a tantas poblaciones oprimidas en las ciudades y en las vastas estepas de estas regiones? Pero los kazajos no se dejaron cautivar por esos atropellos; y de la memoria de la reclusión floreció la atención por la inclusión", señaló el Pontífice, quien subrayó su deseo de que "el recuerdo del sufrimiento y de las pruebas experimentadas sea un bagaje indispensable para encaminarse hacia el futuro poniendo en primer lugar la dignidad del hombre, de todo hombre, y de todo grupo étnico, social y religioso".
Un puente entre dos mundos
Como el dobmra, Kazajistán "crea armonía entre dos cuerdas paralelas", tradición y progreso, frío y calor, y su condición de "puente entre Europa y Asia". Y una panoplia de tradiciones culturales, con 150 grupos étnicos y 80 lenguas, que "componen una sinfonía extraordinaria y hacen de Kazajistán un taller multiétnico, multicultural y multirreligioso único, revelando su vocación peculiar, la de ser país del encuentro".
Un encuentro que se verá reflejado en el séptimo Congreso de Líderes de las Religiones mundiales y tradicionales, razón oficial de la visita papal. En este punto, el Pontífice recordó que "la Constitución de Kazajistán, al definirlo laico, prevé la libertad de religión y de credo", un ejemplo de "una laicidad sana, que reconozca el rol valioso e insustituible de la religión y se contraponga el extremismo que la corroe, representa una condición esencial para el trato equitativo de cada ciudadano, además de favorecer el sentido de pertenencia al país por parte de todos sus elementos étnicos, lingüísticos, culturales y religiosos".
Libertad de expresión, religiosa y de conciencia
Y es que, para el Papa, "las religiones necesitan la libertad de expresión. Y, por tanto, la libertad religiosa constituye el mejor cauce para la convivencia civil". La "tutela de la libertad" es la "única condición para que el encuentro entre las personas y los grupos sea real y no artificial". En este punto, el Papa agradeció la abolición de la pena de muerte en el país, y pidió "garantizar la libertad de pensamiento, de conciencia y de expresión, para dar espacio al rol único y equitativo que cada uno ocupa en el conjunto".
Dirigiéndose a las autoridades civiles, "primeras responsables en la promoción del bien común", les recordó que la democracia "constituye la forma más adecuada para que el poder se traduzca en servicio a favor de todo el pueblo y no sólo de unos pocos".
"Sé que se ha comenzado, sobre todo en los últimos meses, un proceso de democratización dirigido a reforzar las competencias del Parlamento y de las Autoridades locales y, en términos más generales, una mayor distribución del poder", destacó el Papa, quien pidió "proseguir hacia la meta sin volverse atrás".
Democracia contra la corrupción
"Es necesario —en todas partes— que la democracia y la modernización no se queden sólo en palabras, sino que confluyan en un servicio concreto al pueblo: una buena política hecha de escucha de la gente y de respuestas a sus necesidades legítimas, de una constante implicación de la sociedad civil y de las organizaciones no gubernamentales y humanitarias, con una atención particular respecto a los trabajadores, los jóvenes y los sectores más débiles", destacó el Papa, quien subrayó "también —todos los países del mundo lo necesitan— medidas para luchar contra la corrupción".
Y es que "este estilo político realmente democrático es la respuesta más eficaz a posibles extremismos, personalismos y populismos, que amenazan la estabilidad y el bienestar de los pueblos", en mitad de un desafío global para el desarrollo integral, actualmente "secuestrado por una injusticia difundida, que provoca una distribución desigual de los recursos". "Y es tarea del Estado, pero también del sector privado, tratar a todos los integrantes de la población con justicia y paridad de derechos y deberes, y promover el desarrollo económico no en razón de las ganancias de unos pocos, sino de la dignidad de cada trabajador".
Vengo para amplificar el grito de tantos que imploran la paz, camino de desarrollo esencial para nuestro mundo globalizado
Para finalizar, el Papa destacó que Kazajistán "se configura como encrucijada de importantes intersecciones geopolíticas; lo que le da, por tanto, un rol fundamental en la atenuación de los conflictos". Una tarea especial en estos momentos: "Yo llego aquí mientras está en curso la insensata y trágica guerra originada por la invasión de Ucrania, mientras otros enfrentamientos y amenazas de conflictos ponen en peligro nuestra época. Vengo para amplificar el grito de tantos que imploran la paz, camino de desarrollo esencial para nuestro mundo globalizado".
Vuelta al 'espíritu de Helskinki' y al multilateralismo
"Por lo tanto -concluyó-, es cada vez más apremiante la necesidad de extender el compromiso diplomático en favor del diálogo y del encuentro, porque el problema de algunos es hoy problema de todos, y quien ostenta más poder en el mundo tiene más responsabilidad respecto a los demás, especialmente a los países más expuestos a las crisis causadas por la lógica del conflicto".
"Es la hora de evitar la intensificación de rivalidades y el fortalecimiento de bloques contrapuestos. Necesitamos líderes que, a nivel internacional, permitan a los pueblos entenderse y dialogar, y generen un nuevo “espíritu de Helsinki”, la voluntad de reforzar el multilateralismo, de construir un mundo más estable y pacífico pensando en las nuevas generaciones. Y para hacer esto es necesario la comprensión, la paciencia y el diálogo con todos. Repito, con todos", finalizó Bergoglio.
Boletín gratuito de Religión Digital
QUIERO SUSCRIBIRME