El Gobierno arranca este martes el proceso para resignificar Cuelgamuros 2025: medio siglo sin Franco, ¿y sin los benedictinos en el Valle?

Una resignificación cuyos primeros pasos comenzarán a darse este martes, cuando se reúna por primera vez una comisión interministerial con el objetivo de plantear "qué debe ser" el recinto y los espacios que lo componene: la basílica, la cripta, la presa fluvial, la tienda... y los monjes que viven en el recinto
El Ejecutivo debe arbitrar una fórmula que le permita la reconversión del conjunto monumental en un Centro de Interpretación, así como extinguir y liquidar la Fundación de la Santa Cruz, paso necesario para expulsar a los benedictinos de Cuelgamuros, y hacerlo sin que se vulneren los Acuerdos Iglesia-Estado
No lo tendrá fácil, entre otras cuestiones por la rotunda negativa de la comunidad, y de su prior, Santiago Cantera, a abandonar Cuelgamuros. Algo a lo que sólo puede obligarles su superior en la comunidad de Solesmes (que ya anunció en su día que no iba a interferir en un asunto que no le competía) o la Santa Sede
No lo tendrá fácil, entre otras cuestiones por la rotunda negativa de la comunidad, y de su prior, Santiago Cantera, a abandonar Cuelgamuros. Algo a lo que sólo puede obligarles su superior en la comunidad de Solesmes (que ya anunció en su día que no iba a interferir en un asunto que no le competía) o la Santa Sede
2025. Esta fecha está marcada en rojo por el Gobierno socialista, y por los actuales habitantes del Valle de Cuelgamuros. El 20 de noviembre del año próximo se cumplen 50 años de la muerte del dictador Francisco Franco, y para esa fecha el Ejecutivo querría tener listo el proceso para la resignificación del Valle de Cuelgamuros.
Una resignificación cuyos primeros pasos comenzarán a darse este martes, cuando se reúna por primera vez una comisión interministerial con el objetivo de plantear "qué debe ser" el recinto y los espacios que lo componene: la basílica, la cripta, la presa fluvial, la tienda... y los monjes que viven en el recinto.
La comisión estará presidida por el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática y la integrarán también los ministerios de Presidencia y Justicia (Félix Bolaños); Hacienda (María Jesús Montero); Transportes y Movilidad Sostenible (Óscar Puente); Trabajo y Economía Social (Yolanda Díaz); Transición Ecológica (Teresa Ribera); Vivienda (Isabel Rodríguez); Cultura (Ernest Urtasun), y Ciencia e Innovación (Diana Morant), además del titular de la Presidencia del Consejo de Administración del Patrimonio Nacional (en este momento, Ana de la Cueva).

El Ejecutivo debe arbitrar una fórmula que le permita la reconversión del conjunto monumental en un Centro de Interpretación, así como extinguir y liquidar la Fundación de la Santa Cruz, paso necesario para expulsar a los benedictinos de Cuelgamuros, y hacerlo sin que se vulneren los Acuerdos Iglesia-Estado. En principio, no está sobre el papel la desacralización de la basílica, y se prevé abrir un canal de comunicación tanto con el Arzobispado de Madrid como con la Santa Sede para encontrar otra congregación o grupo religioso que pueda encargarse de la vida sacramental y litúrgica del recinto.
No lo tendrá fácil, entre otras cuestiones por la rotunda negativa de la comunidad, y de su prior, Santiago Cantera, a abandonar Cuelgamuros. Algo a lo que sólo puede obligarles su superior en la comunidad de Solesmes (que ya anunció en su día que no iba a interferir en un asunto que no le competía) o la Santa Sede.