Consejo General del Poder Judicial
Me resulta sorprendente que nadie en el PP responda una y otra vez con algo elemental, poner en claro de qué va el asunto de la renovación del Consejo General del Poder Judicial.
| Pablo Heras Alonso.
Lo que flota en el ambiente, gracias a las explicaciones del otro partido, es que el PP pretende que los jueces sean siempre “de su bando”. Y flota también en el ambiente algo que la masa no sabe, que lo que está en juego es la INDEPENDENCIA efectiva de uno de los tres poderes del Estado, quizá el más importante, la JUSTICIA.
¿Y dónde está el quid de la cuestión?
Hoy, cuando sale a colación algún organismo relacionado con la justicia, se habla de “jueces de derechas” y “jueces progresistas”. ¡Menuda corrupción del lenguaje! ¡Menuda tergiversación del espíritu de la Constitución! ¡Menuda quiebra de una de las tres patas en que se sustenta la DEMOCRACIA! ¡Menuda perversión de la política! ¿Qué tiene que ver con la ley que uno sea de derechas o de izquierdas (que no “progresistas”)? ¿No se trataría hablar más bien de jueces que aplican la ley, sea la que sea su ideología política?
Obligado es citar aquí el artículo 117 de la Constitución: La justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey por Jueces y Magistrados integrantes del poder judicial, independientes, inamovibles, responsables y sometidos únicamente al imperio de la Ley.
Volviendo a lo que se viene dirimiendo desde hace cinco años, creemos que no es tan difícil de entender dónde está el nudo gordiano de este embrollo:
1º. ¿Cuál es la labor de los jueces? Aplicar la ley. Creo que en eso estamos todos de acuerdo.
2º. ¿Cuál es el requisito para aplicarla? Que los jueces sean independientes de las otras dos patas de la democracia, el poder legislativo (las Cortes) y el poder ejecutivo (el Gobierno).
3º. ¿Qué dice la Constitución respecto a la composición del CGPJ? Previendo lo que ha venido después, dice que éste se ha de componer de 21 miembros,12 de ellos elegidos por los mismos jueces, 4 por el Congreso y 4 por el Senado. Para la elección de estos 8 miembros, se necesitará el acuerdo de 3/5 del Congreso y del Senado.
4º. ¿Cómo se modificó el artículo 122? Fue en 1985 (Ley Orgánica del CGPJ) gobernando el PSOE, pero con la anuencia del PP, también interesado en el mangoneo. Ambos se pusieron de acuerdo en que los 12 miembros que el cuerpo judicial elegía, serían a partir de 1985 elegidos por las Cortes (6) y por el Senado (6).
5º Aunque es cierto que las condiciones para la elección eran claras y, en cierto modo, precautorias, este nuevo sistema acabó con la independencia judicial. Interesaban jueces afines al partido político gobernante. Ya lo dijo Alfonso Guerra en referencia a la muerte de Montesquieu. En su día, 1.400 jueces ya alzaron su voz contra este atentado.
¿Cuál es el sistema más democrático y constitucional? Lógicamente el que dice la Constitución (Titulo VI. Artículo 122) No puede ser que el Poder Legislativo sea el que elija, y por tanto controle, al Poder Judicial.
Vamos a aterrizar diciendo algo que parece de Pero Grullo y que también implica un interés personal de los referenciados, los jueces. Olvidando togas, estamentos, posiciones de prestigio, etc. en que parecen revolotear estos “puñeteros” miembros de la justicia, no podemos olvidar que los jueces son personas como cualquiera de nosotros que quieren ascender en el escalafón y ganar más dinero y prestigio. ¿Cómo? Sometiéndose y apoyando a quien tiene la sartén por el mango, el Poder Ejecutivo.
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Dicho lo cual, sólo queda desear a cuantos acceden por aquí lo mejor para sus vidas: tranquilidad, paz, mejora en su condición, ciertas dosis de felicidad, aunque sea a trozos, alejamiento de hospitales... Son días estos en que todo se vuelve "deseos". No sé si incluir también aquí a quienes, con poca gracia, se refieren a mí como "predicador" o "escribidor". En tiempos de anonimato, me estigmatizaban de ello; hoy, que accedo con mi nombre, estos dos me lo quitan para "anonimatizarme". Si en esto consiste su gramo de felicidad...