Insisto, ¿nos están tomando el pelo?
Son innumerables las declaraciones de altos y altísimos personajes eclesiales diciéndonos que el aborto es un crimen abominable. Aunque a veces se cuele algún Fisichella diciéndonos que no hay que pasarse en algunos casos o algún cardenal tenga en su presbiterio a un cura que paga abortos. Tanto lo han repetido que yo hasta me lo creí. Y estaba convencido, en mi ingenuidad, de que se trataba de un gravísimo pecado y que debíamos oponernos a él con todos nuestros medios y arrostrando todas las consecuencias. Que para algunos son gravísimas. Por ejemplo para los médicos que se niegan a practicarlos jugándose su carrera y con ella sus lentejas.
Pero parece ser que no es así. Que médicos y farmacéuticos católicos están haciendo el canelo, que es absurdo salir a la calle protestando y que Celia Villalobos es una candidata maravillosa para todos los católicos.
Acabo de leer dos noticias que me han indignado. Luego os pondré los enlaces. Y no tanto, que también, con sus protagonistas como con quienes los consienten. Que con su silencio y su tolerancia se hacen cómplices de los que creíamos repugnantes asesinatos y no deben ser más que bagatelas fisichelianas o nostachianas.
Germinans nos da cuenta de una monja benedictina y trotatelevisiones, llamada Teresa Forcades, de la que nos dice:
"Preguntada sobre la Píldora del día después (eufemismo que oculta la trealidad de lo que es: una píldora abortiva), Sor Forcades explicó la experiencia que tuvo en un hospital norteamericano en el que por protocolo daban esta píldora a todas las jóvenes que habían sido violadas. Esta determinación a ella le parece fantástica por ·criterios humanitarios". Y no sólo eso sino que es partidaria que esta píldora abortiva sea conocida y esté al alcance de todas las mujeres.
Lo más escandaloso es el argumento que hace servir para defender el aborto. Según ella el aborto no es un crimen como lo es asesinar a otra persona, porque el feto no es otra vida sino que forma parte de la madre, con quien tiene una relación única y singular. Incluso llega a decir que ha sido Dios quie ha puesto este feto en la madre y por tanto es la madre la que debe decidir. El entrevistador incidió en que ésta no era la doctrina de la Iglesia, a lo que ella contestó diciendo que no hablaba en nombre de la Iglesia sino en el suyo propio"
Y por Religión en Libertad nos enteramos que la congregación religiosa de la Santa Cruz, que no tiene nada que ver con el Opus Dei, la que tiene en los Estados Unidos la Universidad de Notre Dame que homenajeó a Obama ante la protesta de tantos obispos, realiza en África abortos, reparte preservativos y se cisca en todo lo que nos dicen es la moral de la Iglesia al respecto.
Si Germinans y Religión en Libertad han levantado una calumnia contra dignísimos religiosos y religiosas debe saberse. Por el honor de los imputados. Y si dicen la verdad es una vergüenza que la benedictina y los de la Santa Cruz anden sueltos como católicos. Y como católicos representativos. Porque tienen más peligro que una piraña en un bidé.
Ya está bien de tanta tolerancia, de tanta bula para algunos, de tanta tomadura de pelo al pueblo de Dios cada vez más desconcertado. Aquí alguien está haciendo trampas. Y la gente, antes o después, manda a los tramposos a hacer puñetas.
http://www.germinansgerminabit.org/
http://www.religionenlibertad.com/noticias/el-rector-notre-dame-directivo-una-organizacion-promueve-aborto-seguro-africa