La sede del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), acogió la VI Asamblea General de la Red CLAMOR, realizada de 12 a 14 de septiembre de 2023 en Bogotá. Un encuentro inspirado en la frase del profeta Isaías que también está presente en el actual proceso sinodal: “Ensancha el espacio de tu tienda”.

Analizar la realidad y responder

Una oportunidad para analizar los nuevos escenarios de la realidad migratoria de América Latina, identificando sus principales desafíos de cara al 2024. Junto con ello, profundizar en los fundamentos doctrinales y la Espiritualidad del trabajo pastoral en el área de la movilidad humana forzada. También una ocasión para evaluar los avances y dificultades de las Redes CLAMOR Nacionales e identificar las acciones para fortalecerlas o crearlas según el caso.

La VI Asamblea de la Red CLAMOR ha sido momento para compartir las acciones y procesos realizados desde junio de 2022 y de presentar las diversas herramientas pastorales desarrolladas, así como sentar las bases del Plan Operativo Anual 2023-2024. Un espacio para celebrar el don de la fraternidad y la alegría de caminar juntos tejiendo Red.

La asamblea comenzó con un momento de espiritualidad, que dio paso a un análisis de la realidad desde diferentes perspectivas, contando también con la voz de los propios migrantes, aspectos que fueron profundizados en los talleres realizados.

Cardenal Ramazzini, nuevo presidente

Durante la asamblea ha sido elegida la nueva presidencia, en la que el cardenal Álvaro Ramazzini, obispo de Huehuetenango (Guatemala), será el nuevo presidente. Según el purpurado, “la Red Clamor nació como una respuesta a todos esos gritos de tantas personas que tienen que ver con una problemática muy seria, la problemática de la trata de personas”. Según su nuevo presidente, que sucede a Mons. Gustavo Rodríguez Vega, arzobispo de Yucatán (México), elegido recientemente presidente de Cáritas América Latina y Caribe, “en la Red Clamor también tenemos la misión de ir haciendo conciencia sobre la realidad migratoria que afecta a tantos y tantos latinoamericanos, a lo largo y a lo ancho de América Latina y del Caribe”.

Haciendo balance de la asamblea, que considera muy fructífera, el cardenal Ramazzini, destacó el análisis de la realidad y la revisión de lo que tienen que hacer como “red de organizaciones que están involucradas en el tema migratorio, la trata de personas, la gente que ha tenido que salir de su país por razones de persecución política”. En sus palabras, el obispo de Huehuetenango ha destacado el abordaje de todo el tema del “tráfico de menores que son usados para la prostitución, para ir reafirmando una posición muy clara de la Iglesia católica y de quienes nos consideramos cristianos delante de estos fenómenos que tienen que ver con la movilidad humana”.

Necesaria unidad de esfuerzos

El cardenal guatemalteco insistió en la importancia de que “estar juntos y juntas nos anima para darnos cuenta de que, sólo en la unidad de los esfuerzos y del compromiso tendremos la fuerza, dada indudablemente por el Señor Jesús, para enfrentar esta problemática”. Una realidad la de la trata de personas, “que duele, que indigna, que da vergüenza cuando uno sabe que están envueltas personas que se dicen creyentes en nuestro Señor Jesucristo, pero para quienes lo más importante es ganar dinero, y ganar dinero a expensas del sufrimiento de muchas mujeres”. El purpurado destacó que “la trata de personas ahora no se refiere solamente a mujeres, sino también un tráfico de niños que los utilizan para satisfacer las perversiones sexuales de personas que con su dinero piensan que pueden hacer todo lo que quieran”.

Por eso, ha resaltado que “es una realidad que para quienes quieren tener una conciencia cristiana sensible no puede pasar desapercibido”. Por ello ha denunciado que “a nivel de las comunidades de fieles católicos estos temas se mencionan, pero no encontramos receptividad en parte de los fieles, pareciera como que tienen miedo, pareciera que quisieran hacer lo del avestruz, de meter la cabeza en la tierra para no darse cuenta de la problemática que existe”. De ahí la importancia de un encuentro que “nos anima a quienes participamos a no perder ese ímpetu de lucha, de esfuerzo, que incluye la concientización de todas las personas con las que nos relacionamos en nuestras comunidades”. Para seguir avanzado, espera que “haya una acogida muy favorable de las conclusiones en la línea de una mayor concientización sobre esta problemática”.

Creación de la Comisión de Trata de Personas

En la misma línea del nuevo presidente, la Hna. Rose Bertoldo destaca que fue “una asamblea para estudiar la realidad y también para tomar conciencia de la realidad de la migración forzada en el continente y también para poder darnos cuenta de la realidad de la trata de personas en sus distintas formas, que lamentablemente ha crecido mucho en las distintas regiones del continente”.

La Hna. Rose Bertoldo destaca la creación de la Comisión de Trata de Personas, de la que ha sido elegida coordinadora. Una realidad que hasta ahora “no había sido una prioridad dentro de la Red Clamor”, en palabras de la religiosa. Según ella, que conoce en profundidad esta problemática por su trabajo en la Red un Grito por la Vida, “esto contribuirá en gran medida a fortalecer las redes que ya están trabajando para combatir la trata de personas, las redes de América Latina y el Caribe. También hará que el tema de la trata de personas sea una prioridad en el trabajo de atención a migrantes y refugiados, que hasta ahora no había sido muy priorizado”.

Del estudio del documento que se elaboró para esta asamblea, afirmó la religiosa, “quedó muy presente este gran clamor sobre la necesidad de trabajar para visibilizar la trata de personas, así como la necesidad de trabajar para prevenir la trata de personas en las casas de migrantes, en los lugares de acogida y en otros espacios, ya que muchos migrantes terminan siendo víctimas de la trata de personas”.